Pedro Larena deja su cargo como consejero delegado de Popular mes y medio después de la llegada de Emilio Saracho al banco como presidente. El Popular perdió ayer el 10,44% de su valor en Bolsa, la mayor caída del Ibex 35.

Según informó la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Larena ha manifestado al presidente del consejo de administración su deseo de cesar en el cargo por motivos "estrictamente personales". Larena fue nombrado "segundo espada" de Popular en julio de 2016, de forma que lleva en el cargo de consejero delegado menos de un año. Durante la mayor parte del tiempo que ha formado parte del equipo directivo del banco, Larena trabajó con el anterior presidente de la entidad, Ángel Ron, que cesó de ese cargo el pasado 20 de febrero. Para tomar las riendas del banco, el consejo de administración eligió a Saracho, que días después de su llegada "fichó" a un exdirectivo de Telefónica, Miguel Escrig, como director general adjunto a presidencia.

Por otro lado el Popular no reformulará las cuentas de 2016 pero incluirá las correcciones que sean oportunas de forma retroactiva en los estados financieros del primer semestre tras una auditoría interna de la cartera de crédito y de la ampliación de capital, según informó la entidad a la CNMV. No obstante, el banco ha asegurado que las desviaciones detectadas en sus cuentas "en ningún caso" representan un impacto "significativo". El auditor observa "insuficiencia" en determinadas provisiones, la "posible obligación" de dar de baja alguna de las garantías asociadas a operaciones crediticias dudosas y determinadas financiaciones a clientes que pudieran haberse utilizado para la adquisición de acciones en la ampliación de capital de mayo de 2016. El ministro Luis de Guindos afirmó ayer que el Popular es "solvente".