El sector asturiano de la construcción tiene más trabajadores autónomos que asalariados. Una tendencia que se ha ido agravando durante estos últimos años a pesar de la leve recuperación del mercado laboral y de que la Inspección de Trabajo ha recibido cientos de denuncias por parte de los sindicatos para pedirle que indague en posibles casos de "falsos autónomos".

Según los datos que acaba de divulgar la Fundación Laboral de la Construcción (FLC), en la región hay 8.167 asalariados en el sector del ladrillo, que trabajan para alguna de las 1.581 empresas del gremio. Sin embargo, ya hay otros 8.832 que están acogidos al régimen de trabajadores por cuenta propia. La diferencia es de 665 a favor de los segundos y la situación lleva repitiéndose cuatro años. Esta circunstancia era la inversa durante la época de bonanza e incluso siguió así en los primeros años de desplome del sector. "Somos la única comunidad en la que ocurre esto", aseguró Jeremías dos Santos, secretario general de la Federación de Construcción de CC OO de Asturias.

Detrás de esos números, sospechan los sindicatos y el Gobierno del Principado, se esconde un fraude por parte de muchas compañías que están obligando a algunos trabajadores a hacerse empleados por cuenta propia cuando en realidad trabajan para ellas como un asalariado más. Son falsos autónomos. Así, las compañías logran un importante ahorro en la nómina y en cuotas a la Seguridad Social.

Estas anomalías en el mercado laboral ligado al ladrillo son las que han animado al Principado, a la patronal del sector, CAC-Asprocon, y a los sindicatos mayoritarios, CC OO y UGT, a firmar un convenio de colaboración con el objetivo de que la Inspección de Trabajo y la Seguridad Social estrechen durante los próximos dos años la vigilancia en el sector. Tirando de números, el secretario general de la Federación de Metal, Construcción y Afines (MCA) de los ugetistas, Jenaro Martínez, aseguró que actualmente hay 1,1 autónomos por cada trabajador asalariado, cuando hace sólo unos años la proporción era de tres asalariados por cuenta ajena por cada autoempleado.

Los sindicatos llevan ya un par de años denunciando esta situación ante la Inspección de Trabajo. Sólo en 2015 registraron 207 denuncias contra posibles falsos autónomos, mientras que entre enero y octubre del año pasado registraron 173. Son 380 en total. En el acuerdo, que fue rubricado en la mañana de ayer, se incluye reforzar "la vigilancia, el control y la sanción ante el fraude", apuntó Dos Santos.

El director general de Empleo del Principado, Antonio González, detalló que gracias al acuerdo la Inspección actuará de oficio y con medidas concretas en obras o empresas donde pueda haber indicios de contrataciones irregulares. De hecho, señaló que tienen "sospechas" de la proliferación de falsos autónomos en el sector, dados los llamativos datos estadísticos.

Pero éste no es el único problema al que se enfrenta el sector. Jenaro Martínez aseguró que la normativa prohíbe a las empresas que resultan adjudicatarias de una obra subcontratar más del 60% de la misma. Sin embargo, apuntó el sindicalista, en el Principado ya tienen identificados casos en los que se ha delegado más del 80% de la obra.

También, coincidieron los sindicalistas, se ha detectado que hay un excesivo número de empleados que, aunque están realizando trabajos en el sector de la construcción, están adscritos a otro convenio, generalmente con un sueldo menor.

El presidente de la patronal, CAC-Asprocon, Serafín Abilio Martínez, aseguró que la asociación empresarial lleva tres décadas dando visibilidad a los problemas del sector y defendiendo su profesionalización a través de la formación en la Fundación Laboral de la Construcción (FLC). Ese modelo, destacó, ha permitido formar a 74.000 personas, en su mayoría jóvenes. "Hay que tomar medidas para que esto continúe de cara al futuro", destacó.

El consejero de Industria y Empleo, Francisco Blanco, aplaudió la actitud de los empresarios por "no ponerse de lado y afrontar de cara" el problema de la economía sumergida, el de los falsos autónomos. "Es una satisfacción que esta preocupación sea compartida por la patronal y los sindicatos", añadió el Consejero durante la firma de convenio.