La controversia en torno a la herencia del cantante británico George Michael llega a la Junta General del Principado. El portavoz de IU en la cámara, Gaspar Llamazares, mostró ayer su sorpresa al descubrir, a cuenta de la polémica por el reparto de la jugosa fortuna del cantante, que en Gran Bretaña también está vigente un impuesto sobre las herencias: "Gracias a la disputada herencia de George Michael, acabo de enterarme que el liberal estado británico tiene un impuesto de sucesiones del 40% para la sucesión no directa a partir de 350.000 euros", señaló el diputado.

Con la referencia al que fuera cantante de "Wham!" en mente, Llamazares instó a los representantes políticos contrarios a este tributo a reflexionar sobre su posición: "Si Asturias fuera el infierno de sucesiones, da la sensación de que lo compartimos con muchos más territorios, como el británico". A juicio de Llamazares, el impuesto de sucesiones "sigue siendo imprescindible para financiar servicios públicos".