Las acciones de Popular cerraron ayer la última sesión bursátil de la semana con una caída del 3,628%, de forma que se han situado en un precio de 0,611 euros, en mínimos históricos, y acumulan un retroceso semanal del 24,75%. El valor de la entidad lleva desde el lunes en una caída libre desde que su presidente, Emilio Saracho, abriera la puerta a una ampliación de capital de la entidad o una fusión con otro banco durante su intervención en la junta general ordinaria de accionistas, celebrada el pasado lunes. Las palabras de Saracho se unieron al efecto que ha tenido en la cotización la rebaja de la calificación que el viernes pasado dio a conocer S&P, situándola en 'B' desde 'B+', debido a que entiende que su posición de capital es "débil".