Varios millares de personas reclamaron ayer a lo largo de la calle de Uría y el inicio de Fruela, en Oviedo, la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones en Asturias. La policía nacional estimó la participación en un primer momento en 2.500 personas y en 6.500 cuando la marcha ya había cubierto la mitad de trayecto. La policía local de Oviedo mantuvo por el contrario el cálculo de 2.500 participantes una vez finalizada la concentración frente al parlamento autonómico.

Los organizadores de la protesta (la plataforma ciudadana contra el impuesto de sucesiones, que encabeza el abogado Álvaro López Castro) postulan la supresión total del tributo (para lo que anunciaron movilizaciones nacionales ante el Congreso de los Diputados en fecha por precisar) y, en caso contrario, demandan su armonización en todas las comunidades autónomas.

La marcha, que sólo contó con el respaldo de Foro Asturias (que posee 3 de los 45 escaños de la cámara autonómica), fue muy crítica con las fuerzas parlamentarias y con la institución legislativa, frente a la que se gritó "Ahí está la cueva de Alí Babá", en referencia al personaje del relato "Alí Babá y los 40 ladrones" de "Las mil y una noches". Aunque hubo un reproche generalizado a la política fiscal que emana de la cámara, las críticas nominales se concentraron sólo en el presidente del Gobierno, el socialista Javier Fernández, a quien se le reclamó su dimisión.

Los convocantes, que aseguraron estar recibiendo propuestas ciudadanas para que promuevan un "partido apolítico" -afirmó López Castro-, aseguraron disponer de un apoyo de unos 150.000 firmantes, por lo que sostuvieron que su respaldo popular es superior a los votos obtenidos por los socialistas en las elecciones autonómicas de mayo de 2015, en las que el PSOE logró 143.851 sufragios. En base a estos cálculos, y de la equiparación cualitativa y de legitimidad de firmas y de votos, una de las consignas más coreadas fue "Javier dimite, Asturias no te admite".

Los cinco grupos de la cámara asturiana recibieron 512.776 votos en los comicios autonómicos hace dos años, de los que Foro, el único que apoyó ayer la marcha y que respaldó la supresión del impuesto, obtuvo 44.480. López Castro lamentó la ausencia de las demás fuerzas parlamentarias (PSOE, PP, Ciudadanos, IU y Podemos) pese a haber sido invitados, dijo. Foro estuvo representado por sus tres diputados regionales, encabezados por Cristina Coto, presidenta de la formación.

La plataforma ciudadana contra el impuesto de sucesiones y donaciones rechaza por insuficiente la rebaja del tributo que ya hizo el Gobierno socialista asturiano este año, con la elevación del mínimo exento de 150.000 a 200.000 euros y con la supresión de lo que se denominó como "error de salto" (aumento súbito del gravamen a partir de la cuantía bonificada), y también reprocha por su cortedad la nueva rebaja que acaban de pactar PSOE y PP, a demanda de los populares, y por la que, de aprobarse el proyecto de presupuesto autonómico, el mínimo exento se elevaría (con entrada en vigor el 1 de julio de 2017) hasta los 300.000 euros para herederos directos.

Los organizadores de la protesta de ayer creen que la figura tributaria de sucesiones y donaciones debe desaparecer y, en todo caso, y mientras tanto, las suavizaciones que se decidan deberían extenderse, a su juicio, no sólo a parentescos directos (caso de cónyuges, hijos, nietos y padres), como está previsto, sino también a familiares colaterales como hermanos. Además, para la plataforma las cifras que esgrime el ejecutivo regional tras su reciente acuerdo con el PP tampoco son creíbles.