La Comisión Europea (CE) presentó ayer una propuesta que prevé que los padres y madres europeos puedan disfrutar ambos de un permiso retribuido de cuatro meses hasta que el niño cumpla 12 años e introduce cinco días anuales pagados para cuidar de los hijos enfermos.

La propuesta, que busca conciliar la vida familia y laboral, introduce además un nuevo permiso de diez días para los padres en torno al nacimiento del niño -en España ya es de cuatro semanas- y prevé que progenitores y cuidadores con menores de 12 años a su cargo puedan solicitar horarios flexibles en el trabajo. "Las medidas propuestas buscan en particular aumentar las posibilidades de que los hombres asuman responsabilidades parentales y de cuidado de los hijos. Esto beneficiará a los niños y ayudará a aumentar la participación de las mujeres en el mercado de trabajo", indicó la CE. El ejecutivo comunitario recordó que en 2015 había un 11,6 % menos de mujeres que de hombres con empleo, una diferencia que sube al 30 % cuando las familias tienen hijos menores de 6 años, y que este es uno de los elementos que llevan a la brecha en salarios (16,3 %) y pensiones (40 %).