La Federación Asturiana de Empresarios (FADE) calificó ayer como "muy razonable" la última oferta que a escala nacional han planteado los empresarios como guía para la negociación de las subidas salariales de este año: un incremento del entre el 1% y el 2%, más un 0,5% adicional según elementos variables como los resultados de la empresa, la productividad o el absentismo. Y previno de que en Asturias "habrá sectores y empresas en los que se puedan incrementar los salarios", pero en otros "no será posible".

El presidente de la FADE, Pedro Luis Fernández, salió al paso de las declaraciones realizadas por los dirigentes sindicales durante las manifestaciones del Primero de Mayo y particularmente sobre el aviso que lanzó desde Madrid el secretario general de UGT, el asturiano Pepe Álvarez, quien dijo "Si no hay acuerdo con la CEOE, el proceso de negociación de los convenios se va a convertir en un calvario para los empresarios". Pedro Luis Fernández replicó ayer: "El verdadero calvario de la mayoría de las empresas ha sido la intensa y profunda crisis que les ha afectado desde hace casi diez años. Muchas no lo han superado. Es difícil pensar en un calvario más intenso".

Ante las quejas sindicales porque la recuperación económica no llega a los sueldos, el líder de la FADE subrayó que las empresas están contratando más. Y añadió sobre la subida salarial para este año: "Un incremento rígido y forzado de los salarios conlleva el riesgo de que las compañías que no estén en condiciones de aumentar las nóminas acaben cerrando y destruyendo empleo".

Si se toma como referencia la subida media de los convenios, los asturianos protegidos por la negociación colectiva tuvieron entre 2013 y 2015 incrementos salariales inferiores al 1%, si bien en dos de esos años (2014 y 2015) la inflación media fue negativa en Asturias. En 2016, con un IPC anual del -0,2%, los sueldos afectados por convenios subieron de media el 1,15%. No obstante, cabe precisar que Asturias es una de las regiones donde con más intensidad las empresas recurren a los "descuelgues" de convenio, alegando razones económicas para no aplicar la subidas de sueldos. Entre enero y marzo de este año se produjeron 18 casos, el 13% de todos los registrados en España.