Elke König, presidenta de la Junta Única de Resolución (mecanismo europeo de intervención en caso de crisis bancarias), no quiso ayer comparar la situación del Popular y las dificultades del italiano Monte dei Paschi di Siena, entidad para la que la UE ha autorizado una "capitalización preventiva" con dinero público (por un importe y con un coste para los contribuyentes aún por precisar), procedimiento que para los accionistas y los acreedores del banco (inversores con deuda subordinada y otro tipo de bonos) resulta menos gravoso. En el caso del Popular, los accionistas, grandes o pequeños, pierden todo su dinero, al igual que parte de los bonistas, algo que no ocurrirá en Monte dei Paschi, al persuadir el Gobierno italiano al Europa de que el banco es viable.