Un total de 385 accionistas minoritarios del Popular, agrupados a través de la asociación Aemec, presentaron ayer ante la Fiscalía Anticorrupción de la Audiencia Nacional una denuncia contra los gestores de la entidad bancaria, entre los que figuran su expresidente Emilio Saracho, y el inversor astur-mexicano Antonio del Valle, que poseía el 4,11% del banco.

El consejero delegado de Santander, José Antonio Álvarez, afirmó ayer que la plantilla de Popular "va a tener continuidad" tras la compra de la entidad por parte de Santander y apuntó que el impacto que la operación tendrá sobre las cuentas del segundo trimestre será "muy pequeño".

"La plantilla del Popular, cómo no, va a tener continuidad. Son magníficos profesionales que siguen teniendo que atender a los cuatro millones de clientes, porque durante un tiempo la integración operativa no estará realizada", señaló el segundo ejecutivo de Santander. En relación al posible impacto económico en las cuentas del segundo trimestre, Álvarez apuntó que la operación se hizo tras la intervención de la autoridad de resolución, que tomó medidas para amortizar los instrumentos de capital en mala situación. "Entiendo que el impacto será muy pequeño, pero todavía es pronto para decirlo", dijo Álvarez.