La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CMMV) decidirá en los próximos días si levanta la prohibición de las operaciones con posiciones cortas sobre Liberbank, una vez cumplido el mes de vigencia de la media, o la prolonga hasta el máximo legal de tres meses. De momento, el veto a los bajistas en Liberbank tras la caída del banco Popular "parece que ha dado resultado" porque tranquilizó a un mercado "nervioso", destacó ayer en Oviedo el presidente de la CNMV, Sebastián Albella, durante un almuerzo con empresarios y directivos asturianos organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD).

"La prohibición de las posiciones cortas en Liberbank fue un acuerdo adoptado conjuntamente con la autoridad europea de mercados ante una situación muy especial, y es que todo apuntaba a que la caída del valor estaba relacionada esencialmente con el nerviosismo generado por la resolución del Popular, era un factor exógeno", señaló Albella, que apuntó que el objetivo de la medida excepcional era "cambiar la dinámica y parece que la cosa dio resultado". Sobre la persistencia del veto, el presidente de la CNMV añadió que "dentro de unos diez días valoraremos la situación y decidiremos qué hacer". Las variantes son "o no hacer nada", con lo que una vez cumplido el mes se levantaría la prohibición a los bajistas -los inversores que alquilan acciones para apostar por su caída-, o "prorrogar" la medida, con un máximo legal de tres meses.

Albella señaló que el veto "estaba justificado" y que contó con el visto bueno de las autoridades europeas, cuyas comisiones acabaron de votar la medida a las ocho de la mañana del mismo día que se decidió aprobar la prohibición de las posiciones cortas. Además, apuntó que en el caso del Popular también se estudio esa medida, pero fue descartada porque "las posiciones cortas en el Popular venían de lejos y estaban bastante estabilizadas en cuanto a volumen, e incluso en las dos últimas semanas contribuyeron en sentido comprador a sostener el valor. Además eran posiciones cortas que todo hace indicar que estaban relacionadas con el juicio que hacía el mercado sobre la situación de la entidad, mientras que en el caso de Liberbank la razón fue exógena".

El dirigente de la CNMV, que destacó que desde el órgano supervisor se vivió "con gran dramatismo" la caída del Popular, apuntó que las posiciones cortas "es una operativa legítima" que ayuda a "dar profundidad y calidad a la negociación", a "dar más liquidez" y "a llamar la atención de problemas graves como ocurrió con Gowex o Abengoa, en los que las posiciones cortas anticiparon los problemas". Con el veto, las posiciones bajistas en Liberbank han descendido al 0,9%, mientras que en otras entidades bancarias como el Sabadell subieron hasta el 2,41%.

Albella inició ayer su intervención en el acto de la APD en Oviedo destacando sus vínculos con Asturias. Ejerció como secretario del consejo de Hidrocantábrico y su madre es de Colunga y residió en Cangas del Narcea. "Me siento muy a gusto aquí", afirmó antes de abordar los tres temas sobre los que pivotó su charla: el "brexit", la normativa europea Mifid II y el mercado de capital.

Sobre la salida del Reino Unido de Europa, Albella analizó sus repercusiones para las entidades financiera de la City, con la pérdida pasaporte europeo para prestar servicios y la necesidad relocalizar actividades. "Desde la CNMV estamos muy activos para atraer a España esas actividades", señaló Albella, que puso como ejemplo los eventos organizados en Londres para destacar las ventajas del país en materia laboral o fiscal. "Es difícil que un pez gordo de la City se recoloque en España, pero quizá haya alguna sorpresa", señaló. Albella también repasó los cambios que introduce la directiva europea Mifid II, que debe entrar en vigor el 1 de enero de 2018, y entre los que destacan la prohibición de incentivos del fabricante de productos financieros a los gestores de carteras y asesores financieros independientes o la obligación del fabricante de tener en cuenta el "mercado objetivo" al que irán dirigidos los productos financieros.

El presidente de la CNMV animó a las empresas a salir a Bolsa para ganar en transparencia y reputación, poder crecer y en el caso de las familiares profesionalizarse. "Echamos de menos que haya más empresas industriales en Bolsa", señaló Albella.

En el turno de preguntas, tras la cascada de cuestiones sobre el Popular y Liberbank, el presidente de la CNMV apuntó que no se prevén ni es partidario de nuevas reformas del gobierno corporativo, que no ve "de esta época" la fusión de los mercados europeos en una gran Bolsa, que el programa proteccionista de Trump "no va a ser para tanto" y que ante el avance de las operaciones financieras con robots "preocupa la posible manipulación de los algoritmos para dar señales falsas al mercado, es un tema al que le estamos prestando mucha atención".