Nuevo balón de oxígeno para las cuentas de Duro Felguera. Esta vez llega desde México. El grupo de ingeniería asturiano ha conseguido un contrato para la construcción de unas instalaciones de apoyo para la central térmica de Petacalco por 111 millones de euros. Las obras consistirán en la construcción de los sistemas de almacenamiento y suministro de carbón para el complejo energético. Un almacén estará situado en Puerto de Lázaro Cárdenas y el otro en la propia térmica. Ambos estarán conectados por una cinta transportadora de seis kilómetros de longitud.

Este nuevo contrato supone un nuevo alivio para las cuentas de la compañía, que tiene una deuda superior a los 240 millones. Duro arrastra problemas de tesorería derivados de algunos litigios y de retrasos en los cobros.

Por otro lado, la dirección de Duro y los sindicatos llegaron ayer a un acuerdo para la salida de los 39 trabajadores de la filial Tedesa, que va a echar el cierre. No hubo salvación posible como reclamaban las centrales, que sostenían que la compañía, con sede en Llanera, podía ser viable.

Sin embargo, ambas partes se comprometieron a sacar adelante un plan social para los once empleados de Tedesa mayores de 55 años. Duro abonará una renta a estos trabajadores para no dejarlos "tirados", apuntó un sindicalista. Parte de ellos serán recolocados en otras empresas (los más próximos a los 61 años) para que puedan ser prejubilados mediante el sistema de contratos relevo.

El resto será despedido con una indemnización de 20 días por año trabajado, más un "importante" complemento que pagará Duro y que variaría en función de cada caso. El grupo de ingeniería también les abonará un curso de reciclaje laboral para tratar de facilitar su reinserción laboral.