Infastur, sociedad de UGT de Asturias que obtenía el 99,4% de sus ingresos comerciales de facturaciones a IFES, transfirió 577.561,77 euros entre 2010 y 2015 "directamente a UGT-Asturias o a sus empresas vinculadas, así como al pago de salarios o gastos en vehículos asociados al sindicato o sus empresas", según uno de los informes elaborados por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, sobre el supuesto desvío por UGT y su fundación IFES de subvenciones concedidas en Asturias para la formación. La Benemérita sostiene que buena parte de las subvenciones se usaron para pagar salarios o para el incremento patrimonial del sindicato y de sus empresas.

De esa cantidad, 192.000 fueron transferidos por Infastur a UGT en el periodo investigado (100.000 más lo habían sido en 2009), mientras que 385.561,77 se transfirieron a empresas satélite del sindicato, incluyendo el pago de salarios de personal de Unigem.

Entre 2019 y 2015 Infastur había facturado 831.395,88 euros a IFES por cursos subvencionados a la propia fundación o a UGT (432.595,82 por los subvencionados por el SEPEPA entre 2010 y 2015). Infastur facturaba a IFES por el equipamiento de las aulas, que no tenían coste para el sindicato. Es el caso del edificio Vicasa, en Gijón, cedido por el Ayuntamiento, en el que Infastur generó más del 90% de su facturación a IFES por fondos del SEPEPA. Frente a esos ingresos, los investigadores sólo identifican pagos de Infastur a sus proveedores, relacionados con esas aulas, por 66.824,22 euros.

Los flujos también fueron en sentido inverso. Infastur recibió entre 2013 y 2015 191.500 euros de UGT y 248.000 de otras empresas vinculadas para la compra de un bajo en Langreo por 1,04 millones de euros. De esta forma, Infastur se usó para "paliar las pérdidas que hasta el momento había generado la operación inmobiliaria realizada por la Cooperativa sindical y, por ende, desde el propio sindicato".

El informe señala que a pesar de los beneficios que obtenía Infastur por sus servicios a IFES, sus cuentas bancarias no registraban incrementos de saldos porque esos beneficios "habrían sido transferidos, de una forma más o menos directa, para contribuir a un incremento patrimonial del propio sindicato UGT-Asturias o de su círculo empresarial".