Duro Felguera tiene en estos momentos cinco candidatos a entrar en su capital. El gestor de fondos británico Bybrook mantiene su interés, al igual que la compañía española Elecnor, único grupo industrial que aspira a sumarse al accionariado del grupo asturiano para reflotarlo. A estos dos candidatos se han sumado tres grandes patrimonio familiares españoles, que se han interesado por Duro a través de sus plataformas de inversión, conocidas en el argot como "family offices".

El pasado viernes Duro Felguera comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que había suscrito con sus principales acreedores (Banco de Santander, Santander de Leasing, Caixabank, Banco de Sabadell y Banco Popular) una prórroga del acuerdo de espera de la deuda (295 millones de euros) hasta el 15 de enero de 2018. Esta prórroga, que establece que la parte vencida de la deuda no será exigible durante su vigencia, está sujeta a que antes del día 6 se adhieran a ella Bankia y BBVA y antes del 26 el Banco Cooperativo Español y Liberbank.

Una vez atada la tregua bancaria, las labores para reflotar Duro vuelven a centrarse en las condiciones impuestas por los principales acreedores: desinversiones (se han definido como activos no estratégicos el edificio de oficinas de Madrid e inmuebles en Oviedo y Gijón, valorados conjuntamente en 40 millones), plan de ahorros, cambios en el equipo gestor y fortalecimiento de la estructura de capital, o lo que es lo mismo, la búsqueda de socios.

Duro encargó a Rothschild la organización de un proceso de búsqueda de inversores. Hasta la fecha se han firmado acuerdos de confidencialidad con inversores nacionales e internacionales, con los que se ha compartido un memorándum de inversión que resume las actividades y principales datos financieros de Duro. "Los potenciales inversores están analizando actualmente la información compartida sin que a día de hoy hayan comenzado con ellos negociaciones sobre términos concretos de inversión", señaló Duro en su informe de resultados del primer semestre, publicado el pasado viernes. Aunque no se ha entrado al detalle, sí hay contactos con cinco candidatos, según fuentes al corriente de las operaciones. Por el camino se quedaron un inversor chino y Acciona, que llegó a visitar los talleres de Duro. Mantienen su apuesta:

Bybrook. Este gestor de fondos con sede en Londres y fundado por Robert J. Dafforn mantiene contactos para entrar en Duro desde julio. Está dispuesto a aportar entre 75 y 100 millones de euros y asumir más del 50% del capital de la ingeniería, aunque a través de un instrumento (préstamo a alto interés convertible en acciones a medio plazo) que no convence a la banca.

Elecnor. Es el único grupo industrial interesado en entrar en Duro. Esta compañía española de infraestructuras, energías renovables y nuevas tecnologías, con más de medio siglo de historia, firmó hace más de dos meses el acuerdo de confidencialidad y en los últimos días ha encargado informes del estado de Duro de cara a presentar una oferta. El Gobierno del Principado y los sindicatos han mostrado su preferencia por un socio industrial.

Grandes patrimonios. Tres "family offices" de grandes patrimonios españoles también están interesados en entrar en Duro en solitario o con otros inversores.