Los posibles candidatos a reforzar el accionariado de la ingeniería asturiana Duro Felguera se reducen. Fuentes de Mercadona señalaron ayer que el presidente de la cadena de supermercados, Juan Roig, "no está interesado" en entrar en el capital de Duro.

La compañía asturiana, en apuros por sus deudas con la banca, encargó a Rothsclild la organización de un proceso de búsqueda de inversores. Se firmaron acuerdos de confidencialidad con inversores nacionales e internacionales con los que se compartió un memorándum de inversión que resume las actividades y principales datos de Duro. Sobre los posibles candidatos trascendieron los nombres de las empresas españolas TSK, Acciona y Elecnor -que ya anunciaron públicamente que renunciaban a entrar ahora en Duro- el fondo de inversión británico Bybrook -que mantiene su interés- y tres plataformas de inversión vinculadas a grandes patrimonios familiares, las de los Masaveu, Blas Herrero y Juan Roig. Fuentes al corriente de las operaciones señalaron que en los dos últimos casos hubo diferentes contactos entre representantes de ambas partes.

Sin embargo, fuentes del grupo Mercadona afirmaron ayer que ni Juan Roig ni los fondos de inversión que controla van a entrar en el capital de Duro Felguera. "No hay interés", señalaron sin dar más detalles.

Mientras tanto, la compañía asturiana trata de llegar a un acuerdo con las banca acreedora para que esta le conceda 31 millones de euros en avales que le permitan atender las principales necesidades. La banca exige a Duro garantías por la mitad del importe con la venta de activos.