La reforma del régimen de comercio de derechos de emisión de CO2 en la UE prevé una reducción adicional de los vertidos a la atmósfera de unos 556 millones de toneladas entre 2020 y 2030, lo que corresponde aproximadamente a las emisiones anuales del Reino Unido.

El régimen de comercio de derechos se instauró en 2005 para promover la reducción de emisiones de CO2 y combatir los efectos del cambio climático. Limita el volumen de gases de las industrias con gran consumo de energía, de los productores de energía y de las compañías aéreas. Los derechos de emisión están limitados a un nivel máximo establecido por la UE y las empresas reciben o compran derechos individuales. La crisis económica contribuyó a una caída de las emisiones y a una reducción de la demanda de derechos de emisión, lo que hundió el precio del carbono y provocó que, por ejemplo, las centrales térmicas de carbón sean competitivas en precio.

Con la reforma del régimen de comercio de derechos para el periodo 2020-2030 se pretenden elevar los precios del carbono. Se incrementa el ritmo de reducción de derechos hasta el 2,2% anual y se revisa el sistema de asignación gratuita (limitado a 6.300 millones de derechos) y se centra en sectores con riesgo de deslocalización. Al mismo tiempo se crea un fondo de innovación para la demostración de tecnologías.