La tasa de inflación se situó en el mes de noviembre en Asturias en el 1,4%, tres décimas por debajo de la media nacional (1,7%). La variación de los precios repuntó frente al de octubre debido principalmente a la subida de los carburantes, que impactó en el coste del transporte personal y en el de la calefacción en una parte de los hogares. Así, el componente más inflacionista en Asturias es el del transporte (3,5% interanual), por delante de los gastos de mantenimiento de la vivienda (2,2%) y de las bebidas alcohólicas (1,9%) y de los alimentos (1,5%). En este último capítulo sobresale el encarecimiento del aceite (8,9% más caro de media que en 2016) y la rebaja del precio de las patatas (11%).