Juan Lladró, el mayor de los tres hermanos fundadores de la empresa valenciana dedicada a las piezas de cerámica y porcelana decorativa, ha fallecido esta mañana, a los 91 años de edad.

El empresario natural del Almàssera, impulsó junto con José y Vicente Lladró al principio de los 50, una de las firmas más reconocidas en todo el mundo. Durante su trayectoria laboral, el valenciano formó parte de consejos como Antena 3, entidades bancarias y cámaras. Fue galardonado en 1992 con el premio empresario del año, entre otras distinciones.

El pasado enero, la junta extraordinaria de accionistas de Lladró acordó la venta de la compañía al grupo PHI INdustrial. Así, se imponía la propuesta de la parte de la familia -Juan Lladró y sus hijos, con un 70 % del capital- que defendían esta operación frente a la propuesta de otro de los tres hermanos (José) y sus descendientes, que tenían el 30 % y proponían la venta parcial de la firma a otro inversor.

Con la venta se ponía pone punto final a una trayectoria sin parangón en la economía valenciana. Los hermanos Lladró levantaron un imperio de la cerámica decorativa, que devino en su día en un emblema del lujo, a partir de un horno moruno en su localidad natal de Tavernes donde en los años cincuenta del siglo pasado empezaron a hacer figuras de porcelana.

La innovación y el diseño y un evidente atrevimiento comercial en su internacionalización llevaron a la compañía a ser popular entre los más exquisitos del planeta y a contar con tiendas en la Quinta Avenida de Nueva York o en Rodeo Drive (Los Ángeles), a cuya inauguración acudieron estrellas de Hollywood como Charlton Heston o Lauren Bacall.

Desde aquel esplendor, la firma fue palideciendo con el cambio de siglo de forma paulatina, acumulando pérdidas, caída de las ventas y reducción de plantilla, hasta convertirse en una sombra de los años de vino y rosas.