La agencia de calificación financiera Fitch mejoró en dos escalones la nota de la deuda soberana de Portugal, gobernada por la izquierda, que pasa de "BB+" a "BBB", con lo que el país sale del llamado nivel de "bono basura", en el que permanecía para la calificadora desde noviembre de 2011. Fitch destacó la "firme tendencia descendente" de la deuda pública lusa.