La plantilla de Procoin protagonizó ayer una concentración a las puertas de la sede de la empresa, situada en el polígono de Silvota (Llanera), para protestar por "los impagos" (acumulan dos nóminas y media sin cobrar) y la "deriva" en la que está sumida la firma "desde hace dos meses y medio". "Nos dijeron que ésta iba a ser una situación transitoria debido a una falta de liquidez puntual, pero si nada lo remedia esta empresa, que hasta hace dos meses era viable, está abocada a la liquidación", clamó el presidente del comité, Emilio González. El grupo constructor ha solicitado el concurso voluntario de acreedores e intenta reflotar su situación.
