Recién elegido nuevo presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Belarmino Feito fijó su posición sobre tres cuestiones de actualidad: la subida de los salarios, el futuro de las térmicas asturianas de carbón y el diálogo social con el Principado y los sindicatos.

"Es el momento de subir los salarios, pero no de manera lineal; debe hacerse en la medida en que los sectores vayan percibiendo la recuperación, y en parte de forma ligada a la productividad y a la consecución de los objetivos de las empresas", respondió el líder de FADE a los periodistas.

Belarmino Feito enfatizó durante la campaña electoral la necesidad de disponer de mecanismos para medir la eficacia de los acuerdos de concertación social con el Gobierno asturiano y los sindicatos, y ayer volvió sobre ello: "La concertación es un instrumento útil, pero tenemos que dotarlo de alguna métrica que nos permita concretar más los objetivos y medir cumplimiento, sobre todo en las partidas de inversión".

Ante el riesgo de cierre acelerado de las térmicas de carbón y su presumible impacto al alza en el precio de la electricidad, Feito abogó por "una transición energética que tenga en cuenta las circunstancias del territorio". "Tenemos una gran dependencia del carbón en la dieta energética y debe ser tenido en cuenta; hay muchas empresas asturianas con consumos intensivos de electricidad y con un gran impacto de la energía en sus costes de producción", expuso. Y defendió la creación de "un frente común" que "recoja esas sensibilidades" y defienda la competitividad del tejido industrial de la región.