La rebelión de los pensionistas va subiendo de tono, y promete ir a más. Los jubilados asturianos hicieron ayer una exhibición de fuerza por las calles de Gijón durante una manifestación para defender del sistema público de pensiones y protestar contra la subida por quinto año del 0,25% en sus nóminas, "una miseria", denunciaron los manifestantes. La protesta desbordó las previsiones más optimistas. La marcha fue multitudinaria -40.000 personas, según los organizadores- y los mensajes, de grueso calibre y apuntando contra el Ejecutivo central.

"Pensionista, despierta, este gobierno nos deja en la cuneta", "Menos ladrón, más jubilación" o "No hay dinero para las pensiones porque todo lo tienen los chupones" fueron algunas de las consignas que corearon los manifestantes.

Las recientes promesas del presidente Mariano Rajoy de subir las pensiones mínimas y de viudedad si hay acuerdo presupuestario para 2018 no calmaron los ánimos de los pensionistas, que prometen seguir dando guerra y advierten al Ejecutivo que le espera una "primavera muy caliente" en las calles.

Que la lucha no quedará así e irá más lo verbalizó la escritora asturiana Ángeles Caso, encargada de leer el manifiesto elaborado por las organizaciones convocantes: la Asociación de Pensionistas de Asturias, la Asociación de Pensionistas de Gijón, la Federación de Mayores del Principado, y las federaciones de jubilados y pensionistas de UGT y CC OO. "No vamos a cesar en nuestro empeño de denunciar la situación de los pensionistas, ni de apuntar soluciones al Gobierno y continuar en la calle con medidas cada vez más contundentes", señaló. Pronunció esas palabras delante de un repleto Paseo de Begoña, mientras muchos de los manifestantes aún seguían completando el recorrido de la marcha por la Avenida de la Costa.

Desde el quiosco de la música de Begoña, Ángeles Caso señaló que "el problema que tiene nuestro sistema de pensiones no es demográfico, ni técnico, ni económico, es un problema de voluntad política, de apostar por un sistema de pensiones o de hacerlo por un sistema privado". El Gobierno, y más concretamente Mariano Rajoy, fueron la diana de la mayoría de las críticas y de las reivindicaciones de los jubilados. "Nuestra indignación es cada vez mayor porque el Ejecutivo ha recortado conscientemente las pensiones", dijo Caso.

El comunicado siguió así: "Nos acusan de agitar la calle, de estar manipulados y de que nuestras pancartas no sirven de nada. Tienen razón, estamos manipulados, nos manipulan las pensiones de miseria de nuestras viudas, los contratos basura de nuestros hijos, los salarios de miseria de nuestros nietos, el copago de nuestros medicamentos y la subida de mierda de nuestras pensiones". La frase fue ampliamente coreada por las miles de personas que llenaban en ese momento el paseo de Begoña.

También hubo propuestas. Eran muchos los que llevaban pancartas asegurando que las pensiones son un derecho, y que reprochaban que la última subida (del 0,25%) no da ni para llenar el carrito de la compra. Caso, en nombre de los organizadores, propuso derogar la reforma de las pensiones aprobada en 2013 y que las prestaciones vuelvan a revalorizarse conforme con el coste de la vida, así como no aplicar el llamado factor de sostenibilidad.

Entre el público había una abrumadora mayoría de pensionistas, pero también una nutrida presencia de jóvenes. Precisamente, en la marcha de pensionistas que se celebró hace unas semanas en Oviedo muchos de los participantes habían reprochado que faltaban jóvenes a su lado. Los que serán pensionistas del futuro. Representando a ese colectivo intervino la presidenta del Consejo de la Juventud, Sheila Suárez: "Aquí estamos los jóvenes, y no vamos a permitir que se nos utilice para un enfrentamiento intergeneracional". Muy reivindicativa, destacó que los mayores que están saliendo estos días a las calles para defender sus pensiones son "el espejo en el que debemos mirarnos". "Los jóvenes precarios de hoy no queremos ser los pensionistas precarios del mañana", resaltó. Y terminó su intervención con un mensaje para los jubilados que tomaron la plaza: "Gracias por enseñarnos a luchar".

Los organizadores valoraron muy positivamente el resultado de la masiva manifestación. El líder de UGT, Javier Fernández Lanero, dijo: "Esto va a ser continuo, poco a poco se van incorporando los jóvenes y esto irá a más". También reivindicó que las pensiones tienen que subir en función del coste de la vida. En una línea muy similar se expresó el secretario general de CC OO, José Manuel Zapico: "Con esta protesta se ha lanzado un mensaje claro y rotundo al gobierno del PP para que rectifique su política en materia de pensiones".