El expresidente del Banco Popular Emilio Saracho ha pedido a un Juzgado de Barcelona que suspenda su declaración como testigo en el juicio por la demanda de un accionista de la entidad, por ser una prueba "desproporcionada" que puede "vulnerar" su defensa en el caso penal que tiene abierto. Saracho ruega que, de resultar imprescindible, pueda testificar por videoconferencia puesto que el día de la vista, 22 de mayo, "no existen medios de transporte" que permitan su desplazamiento desde Madrid. Saracho tiene una causa similar abierta en Oviedo. El expresidente del Popular había sido llamado a declarar en el caso de un taxista langreano que había comprado 30.000 euros en acciones de la entidad, pero un problema con la citación obligó a aplazar el juicio hasta finales de mes. Ya estaba previsto que lo hiciera por videoconferencia. El que sí declaró en ese juicio, en una sesión anterior, fue el exsecretario del consejo de administración de la entidad financiera Francisco Aparicio.