El 88,6% del territorio asturiano tiene una pendiente igual o superior al 10% y el 80,4% supera el 20%. Un tercio de la geografía asturiana tiene desniveles superiores al 50%. Como consecuencia de esto, sólo el 18,8% de la superficie regional está en cotas de altitud inferiores a 200 metros. Más del 69% de Asturias se localiza entre los 200 y los 1.200 metros. Esta configuración espacial dificulta y encarece el despliegue de redes terrestres de alta capacidad, caso de la fibra óptica, y también mediante antenas de telefonía móvil para el conjunto del territorio regional, de mismo modo que encarece las redes viarias tanto por carretera como por ferrocarril. Lo que muchas veces se denomina "malas comunicaciones" no es tal sino un hecho físico emanado de una orografía agreste y muy accidentada.

A ello se suma la dispersión poblacional. Asturias tiene 6.895 núcleos para sólo un millón de habitantes en 10.603 kilómetros cuadrados.