"No hay burbuja inmobiliaria sino demanda insatisfecha", señaló ayer en Oviedo el secretario general de la Confederación Nacional de Construcción (CNC), Pedro Fernández Alén, quien subrayó las fortalezas y también exigencias de la nueva Ley de Contratos del Sector Público. La inversión en obra público, afirmó en un acto organizado por CAC-Aprocon, sigue siendo insuficiente.
- ¿Qué entraña la nueva ley de Contratos del Sector Público?
-Supone un cambio total en la contratación pública y que va exigir formación en las administraciones públicas y en la empresas. Elimina burocracia, aporta transparencia en el proceso de adjudicación y da mayor relevancia a la calidad en detrimento de la oferta meramente económica. También da mayor flexibilidad en el acceso de las pymes. La nueva ley implica que desde el 9 de marzo todo el procedimiento se ha de hacer por vía digital. El papel desaparece. Esto forzará a las empresas a digitalizarse.
- La obra pública sigue lejos de las cifras previas a la crisis. ¿Es un error?
-El sector de la construcción ha acometido desde 2007 una reconversión tremenda (el empleo bajó de casi dos millones de trabajadores a poco más de un millón) sin ningún tipo de ayudas públicas, a diferencia de lo que ha ocurrido con el resto de los sectores que sufrieron reconversiones en España. Y además, aunque hay un repunte de las partidas de inversión pública en el presupuesto general del Estado, es un avance pequeño porque se viene de muy abajo. El impulso de la obra pública aún no se ha hecho.
- ¿Consideran necesaria la obra pública para enjugar la tasa de paro, la segunda mayor de la OCDE y de la UE?
-Es necesario por el efecto arrastre que tiene el sector y porque además revierte al Estado 0,6 euros por cada euro de inversión pública. Aunque en obra privada no se precisa volver a las tasas de 2007, en obra pública, sí. La nueva ley de contratación pública va a permitir una mejor planificación de la obra pública y lograr una mayor eficiencia en el destino y uso de los recursos.
- ¿Reclaman la aprobación de los presupuestos de 2018?
-La carencia de presupuesto es mala porque genera inestabilidad y priva de la necesaria planificación.
- ¿Se está reanimando de forma suficiente la inversión privada?
-Está resurgiendo y está cogiendo fuerza, sobre todo en vivienda, favorecida por el aumento de la financiación bancaria. El incremento de la edificación es más potente en las grandes ciudades y en las zonas de costa, en las que la segunda vivienda sigue teniendo mucho atractivo.
- ¿Se está gestando una nueva "burbuja" inmobiliaria, aunque incipiente, al menos en el mercado de alquiler, como dijo el ministro de Fomento?
-En absoluto hay "burbuja". Lo que hay es una demanda embalsada. Por otra parte, se había recomendado impulsar la vivienda de alquiler, y se está haciendo. Hay una demanda insatisfecha que no tuvo financiación. En construcción estamos en 40.000 a 50.000 viviendas anuales en España, cuando lo razonable serían 100.000 a 125.000.
- ¿Hay un alza inadecuada de precios, al menos en alquileres en grandes ciudades?
-No lo vemos. Pero lo que sí tiene que haber es una oferta adecuada.
