El Gobierno alemán de Ángela Merkel se ha fijado como objetivo alcanzar el pleno empleo para 2025 a través de una estrategia nacional de formación continua y la inversión de 4.000 millones de euros en esta legislatura para volver a incorporar a los parados de larga duración en el mercado de trabajo. El desempleo está ahora en el 5,3%.