La dirección de Arcelor Mittal en Asturias y los representantes sindicales llegaron este miércoles a un acuerdo para un ajuste de empleo en el tren de chapa de Gijón que evita el riesgo de cierre de la instalación, en pérdidas desde hace quince meses.

Según informaron los sindicatos, se trata de un preacuerdo que incluye la amortización de un número de puestos de trabajo inferior a los 45 que la empresa puso encima de la mesa en el inicio del diálogo, si bien por el momento el número exacto no ha trascendido. Esa reducción de puestos se hará sin despidos, mediante jubilaciones que no se cubrirán con nuevas incorporaciones.

"Creemos que la negociación del tren de chapa ha sido una de las más complicadas de los últimos años y que el resultado final está muy alejado de lo que nos hubiera gustado conseguir, pero de forma rotunda creemos que es la única solución viable para garantizar el futuro del tren de chapa", señalaron UGT, CC OO y USO mediante un comunicado conjunto.

El preacuerdo será sometido a consulta entre los afiliados por los sindicatos.