Duro Felguera mantiene muchas incógnitas sobre la naturaleza e intenciones de la sociedad Petroza, que llegó a un acuerdo con la familia Álvarez Arrojo, mayor accionista de la ingeniería asturiana, para adquirirle el 24,23%. Acacio Rodríguez, presidente de Duro, tachó esta mañana de "extraño" su proceder (primero anunció una adquisición y luego una opción de compra) y que, salvo una conversación telefónica, no haya mantenido ninguna reunión con la empresa, su dirección y sus acreedores, lo que "no es normal cuando se dice que se aspira a tomar el control de la sociedad".

Duro aseguró que en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) no había esta mañana aún constancia de que Petroza ("un grupo mexicano o seudomexicano") hubiese presentado una denuncia contra la ampliación de capital de Duro, y Rodríguez sostuvo que habrá que aclarar si detrás de la denuncia está Petroza o "el vendedor", en referencia al consejero y expresidente de Duro, Ángel del Valle, miembro de la dinastía Arrrojo, y quien ese caso podría estar actuando de "dinamitero" de la ampliación de capital que debe salvar a Duro y garantizar su continuidad.

"Hay que saber si estamos ante una venta, un amago, un cuento, una simulación de venta o un intento de manipulación de la junta de accionistas", explicó Acacio Rodríguez. "Es sabido", dijo sobre su antecesor en el cargo, "que su posición siempre ha sido el concurso, el concurso y el concurso" de acreedores. "No sabemos los motivos que tiene y al consejo de Duro no le ha gustado esta actitud de enquistamiento y enconamiento en vez de buscar una salida elegante", explicó en referencia a Del Valle.

Duro Felguera ha recibido manifestaciones de interés de potenciales inversores, tanto fondos como grupos industriales y familiares, para participar en la ampliación de capital que, por un importe de 125 millones, acometerá la sociedad si lo autoriza la junta general de accionistas que se celebrará este viernes en Oviedo. El grupo catarí Acec, que ya participa en ingenierías europeas y con el que Duro acaba de constituir una alianza comercial análoga a las firmadas recientemente con la estadounidense Metco y la indonesia Barata. La familia Arias (segundo accionista, con el 10% de Duro, y tradicional aliada de la dinastía Arrojo) ha manifestado su intención de apoyar con su voto la ampliación de capital.

La compañía pondrá a la venta su sede de Gijón pero para permanecer en ella y reiteró que el ajuste de plantilla que se está considerando exclusivamente para las oficinas de Gijón y Madrid "no tiene que ser traumático" ni dificultar "un acuerdo" porque tiene ser que un "plan con la gente y no contra la gente".

El grupo considera que todos los contenciosos (el acta de Hacienda, que alega Petroza en su denuncia; la investigación judicial sobre contratos en Venezuela y las reclamaciones en Argentina, Australia e India) pueden evolucionar de forma favorable.

Duro pretende que el 28 de junio empiecen a cotizar los derechos de suscripción preferente de las nuevas acciones y culminar la ampliación de capital el 23 de julio, fecha prevista para que los nuevos títulos comiencen a negociarse en la Bolsa.