Los cuatro partidos que participan este lunes en el único debate entre los líderes que habrá durante toda la campaña electoral prevén duros ataques a Mariano Rajoy, pero también que haya muchos golpes cruzados entre sus rivales.

De hecho, el equipo de Rajoy se prepara para recibir ataques de Podemos, PSOE y C's, el objetivo de Pablo Iglesias es "medirse" con el presidente del Gobierno y alzarse como única alternativa, mientras que Pedro Sánchez culpará al líder del partido morado de haber 'bloqueado' la negociación y con ello, haber permitido que Rajoy siguiera en la Moncloa. Albert Rivera, por su parte, tratará de buscar un hueco planteando un debate constructivo en el que se pongan en evidencia lo que considera "soluciones mágicas" de Podemos o el enfrentamiento de Rajoy y Sánchez.

Rajoy no entrará en el "juego sucio"

Mariano Rajoy se está preparando a fondo para el debate a cuatro que se celebrará esta noche porque asume que será un 'tres contra uno' y tendrá que defenderse "de la mejor manera posible", según fuentes del Palacio de la Moncloa. Aunque no quiere entrar en el "juego sucio", contará con argumentos suficientes en la recámara por si cree necesario emplearlos ante ataques en temas como la corrupción.

Las fuentes consultadas auguran que el 13 de junio se va a repetir la dinámica que ya se vio en el debate de mujeres, en el que los demás colocaron al PP en la diana. Pero si sus rivales le atacan sin piedad en temas como la corrupción, fuentes de la dirección nacional aseguran que cuenta con datos para responder. En el PP auguran que Albert Rivera le propinará los principales golpes pero Rajoy acudirá con munición suficiente para replicarle si lo considera necesario.

Fuentes de 'Génova' creen que Rajoy se va a manejar bien en este debate porque el formato a cuatro es menos ágil y da a los participantes más tiempo para pensar sus respuestas y colocar sus mensajes, y así lo hará con su objetivo de crear 20 millones de empleos o bajar los impuestos. Además, algunos de sus colaboradores ya han recomendado al jefe del Ejecutivo que acuda tranquilo y opte por "aguantar", dado que de esa forma podrá presenciar los dardos que se cruzan el socialista Pedro Sánchez y el líder de Podemos, Pablo Iglesias.

Sánchez culpará a Iglesias de que Rajoy siga en Moncloa

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, también dedicó este domingo y el lunes a preparar el debate. Sánchez ha trabajado junto a su círculo más próximo, miembros de su Ejecutiva y del equipo de gobierno con el que se presenta a estas elecciones, que llevan días preparando papeles sobre los diferentes temas que se tratarán.

Aunque en los últimos días algunos integrantes del comité de campaña restaban trascendencia a esta cita, asegurando que no será tan decisiva como se puede pensar, en la mente de muchos está el efecto que tuvieron los debates de diciembre y el revulsivo que supuso en el partido su intervención en el 'cara a cara' con Rajoy.

Para este lunes, fuentes socialistas aseguran que Sánchez se plantea un debate "en positivo", porque quiere "aprovechar" la audiencia para explicar el proyecto del PSOE y las soluciones que ofrece a los desafíos a los que se enfrenta España.

Por eso, según estas fuentes, no habrá "salidas de tono ni ataques 'porque sí' a sus adversarios", aunque sí pretende dejar claro "por qué hoy sigue Rajoy": por el "bloqueo" del líder de Podemos, a quien los socialistas han visto más preocupado por los "sillones" que por los problemas de los españoles.

En cualquier caso, aseguran, mantendrá su tono "presidencialista" y anclado en la moderación. Mientras tanto, creen que el líder de Podemos saldrá con un tono conciliador, aunque terminará asomando su otra cara, la que llevó la cal viva al Congreso.

Iglesias quiere medirse a Rajoy

El candidato de Unidos Podemos, Pablo Iglesias, tiene claro que su objetivo en este encuentro es erigirse como la principal alternativa de gobierno al PP y por lo tanto tratará de rivalizar con el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ignorando los previsibles ataques de Rivera y evitando polemizar con Sánchez, al que insiste en presentar como un "aliado" necesario para formar un gobierno de coalición progresista.

Se trata de la primera vez que Iglesias tiene la oportunidad de medirse con Rajoy en un debate en televisión y, según explican fuentes del partido morado, el líder de Podemos tiene "ganas" de ese 'cara a cara', y a la vez siente "curiosidad" por el modo en el que se desenvolverá el presidente en funciones en un formato en el que el candidato de Unidos Podemos se siente especialmente cómodo.

Por todo ello, Iglesias afronta este encuentro sin "preocupación" pero con "prudencia" y dedicará este domingo y el lunes exclusivamente a estudiar en su casa, y con la ayuda de su equipo y del secretario de Economía, Nacho Álvarez, el programa de Podemos, que usará para rebatir con "datos" las ofensivas de sus adversarios, que previsiblemente tendrán que ver con el populismo, Venezuela, y la viabilidad de su proyecto económico. De hecho, la estrategia que Iglesias ensaya consiste en no confrontar y mantener la calma en todo momento, según han explican las fuentes consultadas.

A juicio de Podemos, son Sánchez y Rivera quienes más pueden acusar los nervios en la cita del lunes, ya que son los que más tienen que perder. Aunque en el partido morado consideran este debate "crucial", reconocen que ya no se juegan tanto como en el diciembre, cuando estaban sumidos en plena estrategia de "remontada" y el encuentro era "decisivo". A diferencia de entonces, todas las encuestas prevén ahora un buen resultado para la coalición e incluso el 'sorpasso' al PSOE.

Rivera se centrará en exponer su programa

Por su parte, Rivera preparará, además de los contenidos, aspectos como la actitud y la oratoria, junto al vicesecretario general de C's, José Manuel Villegas; el secretario de Comunicación, Fernando de Páramo; y varios asesores, incluido su jefe de prensa, Daniel Bardavío. En el debate a cuatro antes del 20D, Rivera estaba inquieto y se le notaba en los gestos y en sus intervenciones. Consciente de que eso le restó puntos, ahora se ha propuesto corregirlo.

La preparación ha sido intensa el fin de semana pero el lunes se lo tomará con más calma para así poder estar más "fresco". Aunque repasará la documentación en su casa, por la mañana se relajará nadando y después seguirá el partido de fútbol de la Eurocopa entre España y República Checa.

En una conversación informal con los periodistas tras el mitin de este domingo en Valencia, el líder de Ciudadanos ha explicado que, por un lado, él y su equipo se están ocupando de la actitud y la oratoria. Por otro, están estudiando los datos y la documentación a aportar en cada bloque temático del debate.

Ahora, espera que el debate sea constructivo y que los españoles puedan valorar qué candidato presenta propuestas viables y un proyecto para el país y quiénes ofrecen "soluciones mágicas", como cree que hace Podemos, o se dedican a reprocharse cosas, como Rajoy y Sánchez. Tratará así de buscar un hueco ante Iglesias y Rajoy, previsibles focos de atención ante la polarización de la campaña.