Llega la semana a su fin sin que todavía nadie haya reivindicado los 10 votos de más que recibió Ana Pastor para ser investida presidenta del Congreso en segunda votación.
Los votos de PP y Ciudadanos sumaban 169, no obstante la exministra de Fomento logró el pasado martes el respaldo de 179 diputados. Y aunque las miradas se lanzaron hacia los partidos nacionalistas ni CDC ni PNV han admitido abiertamente que hayan apoyado a la candidata popular para presidir la Cámara Baja.
Así queda la Mesa del Congreso de los Diputados
- Presidenta: Ana Pastor (PP).
- Vicepresidentes, por orden: José Ignacio Prendes (Ciudadanos), Micaela Navarro (PSOE), Rosa Romero (PP) y Gloria Elizo (Podemos).
- Secretarios, por orden: Alicia Sánchez Camacho (PP), Juan Luis Gordo (PSOE), Marcelo Expósito Prieto (Unidos Podemos) y Patricia Prendes (Ciudadanos)
¿De dónde salieron esos diez votos? Todos los partidos nacionalistas han negado su autoría por activa y por pasiva, pero lo cierto es que las cuentas no salen sin que una decena de diputados de CDC, ERC, PNV o CC hayan cambiado su anunciado voto en blanco por un sí a los candidatos del PP y Ciudadanos.
La pregunta ha mantenido en vilo y ha generado todo tipo de cruces y acusaciones entre los partidos durante esta semana, que ha concluido con el anuncio del Rey de empezar la ronda de contactos con los partidos el próximo martes hasta el jueves con la intención de sopesar si puede encargar Gobierno.
Mientras, en el Congreso, los diez votos 'desconocidos' que los nacionalistas pudieron dar a candidatos del PP y Ciudadanos a la Mesa del Congreso siguen alimentando el rifirrafe entre los partidos.
En el PP se afanaron en distinguir lo que consideran una cuestión "técnica", la constitución de la Mesa del Congreso, y lo que serían negociaciones políticas para la investidura, e insisten en que para esto último no cuentan ni quieren contar con los independentistas.
Así, el secretario general del grupo popular, José Antonio Bermúdez de Castro, pidió diferenciar entre "gestos de cortesía parlamentaria" y negociaciones de gobierno y negó tajantemente un "pacto oculto" con los independentistas.
Igual de tajante fue en Antena 3 el vicesecretario de Organización del partido, Fernando Martínez-Maillo: "El PP no tiene ningún acuerdo con los partidos independentistas ni lo va a tener", y "Ciudadanos lo sabe", dijo.
Maillo pidió además a Ciudadanos que se "arremangue" y negocie con el PP y apueste por el "sí" a la investidura de Rajoy, porque además se puede activar una alternativa por parte de PSOE, Podemos, nacionalistas e independentistas, una suma que, ha advertido, "sí da".
Sin embargo, desde Ciudadanos su portavoz en el Congreso, Juan Carlos Girauta, aseguró que su partido sólo se plantearía un sí en la investidura de Rajoy si el PP cambia su candidato.
"¿Qué necesitarían para pasar de la abstención técnica al sí?", se le preguntó a Girauta en una entrevista en la COPE y su respuesta fue que se requeriría "que la persona que se presenta a la Presidencia no fuera la que es".
Por su parte, el PSOE se mantiene firme en su posición, y en el Congreso el portavoz económico del grupo socialista, Pedro Saura, animó al PP a seguir trabajando en el camino del "buen rollo" con CDC y PNV para conseguir apoyos en la investidura, antes de reiterar que su partido "no va a apoyar ni al PP ni a Rajoy".
Saura insistió en que los 'populares' deben seguir por ese "camino" que iniciaron con los nacionalistas en la constitución de las Cortes, el camino "de la derecha española".
El portavoz del PSOE, Antonio Hernandez, señaló que este asunto de los votos secretos "da muchas pistas de lo que puede pasar las próximas semanas" en cuanto a la formación de gobierno. Hernando dijo que ésos son diez votos "que no traen las cigüeñas ni vienen de París", sino que los traen los diputados, y que "no se han producido gratis".
"Hemos pecado de ingenuos -dijo por su parte Pablo Iglesias, líder de Podemos-. A partir de ahora todo es posible. Habrá que preguntarles a Convergencia y al PNV qué van a hacer en la investidura".
