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CARLOS RÁBADE | Candidato de Ciudadanos al Senado por Asturias

"He votado al PP de Aznar, pero a Rajoy hay que echarlo como sea"

"Ganaremos el partido", dice este jefe comercial jubilado, antiguo defensa del Vetusta con fama de "contundente"

Carlos Rábade Fernández.

"Buena gana tienes de meterte en esos berenjenales", le dijo su mujer cuando le comunicó que iba a presentarse como número 3 de la lista de Ciudadanos al Senado por Asturias. Sus tres hijos le animaron a emprender la aventura. Él, por su parte, está convencido de que la apuesta de Albert Rivera es segura. "Es el único que puede unir a los partidos para sacar a este país adelante", asegura. A Carlos Rábade Fernández, nacido hace 60 años en Boo de Aller, antiguo responsable nacional de ventas, la política siempre le gustó, aunque nunca se metió en un partido, hasta que apareció Rivera. "Empecé a escucharle antes de las europeas y me convenció. Le ha echado valor todos estos años en Cataluña. Es un partido joven, con gente muy preparada. Tenemos una propuesta real y viable para la ciudadanía, defendemos lo mismo para toda España, no vamos cambiando de un día para otro, como hacen otros", sostiene.

Antes, sus preferencias políticas iban por otro lado. "Yo he votado al PP de la época de Aznar. En las últimas me abstuve. Rajoy hizo todo lo contrario de lo que prometió en campaña. Quiso ganar las elecciones engañando a los españoles. Hay que echarlo como sea. La gente está cansada de tantos engaños y mentiras", afirma. Y niega tajante que su partido sea "una versión amable del PP", como les echan en cara los socialistas y los podemistas. "Podemos está suavizando su proyecto de cara a a las elecciones, pero defiende cosas irrealizables", opina.

Ayer volvía del acto principal de Rivera en Madrid con las pilas puestas. Llenaron el palacio de Vistalegre. "Estamos muy animados. La gente quiere un cambio. Vamos a ganar este partido", cree. La alusión futbolística le viene que ni pintiparada, puesto que en su juventud jugó al fútbol con seriedad, en el Vetusta, el Europa y el Rayo Vallecano de Aficionados. "Me retiré con 29 años. Me casé muy joven y había que trabajar duro para mantener a la familia", rememora. Jugó de defensa, y reconoce que tenía "fama de duro, contundente". No tenía miedo de ir al choque. "No se puede tener miedo, ni en el fútbol ni en la vida", sostiene.

Concurre a las elecciones para una Cámara que su partido pretende eliminar y convertir en otro órgano que reúna a los presidentes de comunidades autónomas para hablar de asuntos que les competan, como las comunicaciones. "Tenemos claro que es un órgano que no tiene una labor trascendental. Hay doscientos y pico senadores que están allí todo el año y ya se ve lo que hacen, encima con un coste que creemos que debería dedicarse a las cosas que de verdad importan. Es un retiro dorado, un centro social, como me gusta decir a mí, para todos aquellos que terminan en la política", defiende.

Cree a pies juntillas que el viernes llegará el cambio. "El PSOE nos pregunta si pactaremos con el PP. El PP, si haremos un tripartito. Nadie se para a pensar qué pasará si ganamos las elecciones. El bipartidismo llegó a su fin, va a desaparecer", sentencia.

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