Si algún partido en los valles mineros se sintió el gran triunfador de la jornada electoral fue Podemos. No solo porque haya ganado en un concejo como Mieres, o se haya colocado como segunda fuerza en las Cuencas. Los más de 20.000 votos recibidos han supuesto un espaldarazo para la morada. Pese a ser la primera fuerza, el PSOE elude hablar de satisfacción. En el PP dan por buenos sus resultados, en unos territorios nada proclives. Finalmente, IU ha sido la gran damnificada. Los 6.000 votos perdidos la alejan mucho de los resultados obtenidos en otros comicios como los municipales de este mismo año, donde ganaron alcaldías como la de Mieres -con mayoría absoluta-, o Langreo, junto a Podemos, Lena y Riosa.

El socialista Adrián Barbón, alcalde de Laviana y número 4 de la lista del PSOE al Congreso, aseguraba ayer que a nivel comarcal hubo "buenos resultados, ganando en ocho concejos de los diez de los valles mineros". Y apuntó que pese a la caída nacional, en Asturias se logró mantener la segunda plaza en votos. Sin embargo, Barbón no quiso valorar los resultados en las cuatro grandes ciudades de Asturias, donde los socialistas han sido la tercera fuerza. "Sería un error, hay que mirar los datos a nivel global", apuntó.

La portavoz municipal de la Podemos en Mieres, Montse Remis, aseguraba estar "eufórica" por el resultado obtenido. "Se ha visto que la gente quería un cambio", apostilló, para dar paso a una comparativa entre las dos citas electorales de 2015: "En Mieres, por ejemplo, pasamos de 2.500 votos en mayo, a más de 6.000 ahora, lo que evidencia una gran fuerza".

El PP entiende que, en el contexto de los valles mineros, el resultado de ayer es aceptable, aunque se mostraron preocupados por "el giro de las Cuencas mineras no a la izquierda, sino a la extrema izquierda", en palabras de José Manuel Rodríguez, presidente de los populares de Mieres.

Desde IU, la coordinadora en Mieres, Beatriz González, aseguraba que "en las Cuencas estamos donde estábamos hace años y, a nivel general, nadie se esperaba que Izquierda Unida mantuviera un millón de votos después de su exclusión en la campaña". Son unos resultados que no se han visto corroborados por el número de diputados a causa de la ley electoral.