De caras largas y gesto serio a una satisfacción nada disimulada por evitar el "sorpasso". La sonrisa abierta con la que comparecieron Adriana Lastra y Javier Fernández en la sede de la Federación Socialista Asturiana (FSA) de Oviedo, al filo de las once y media de la noche, reflejaba el alivio de un partido que se vio con la soga al cuello durante la campaña electoral. "Tenemos una sensación ambivalente, una de satisfacción porque parecía que nos iban a pasar y no pasaron; la ciudadanía reaccionó y el PSOE sigue siendo la referencia de la izquierda", resumió Javier Fernández, quien, no obstante, reconoció que "las aspiraciones en Asturias y en el ámbito nacional son otras". Los socialistas asturianos llegaban al 26-J con la losa de unas encuestas que daban por hecho el "sorpasso" ante Unidos Podemos, además de una derrota segura a manos del PP. De ahí que el resultado, sin ser una victoria, sirviera de bálsamo en la sede de la FSA, al menos en la noche electoral. "Ha sido algo heroico", llegó a decir la cabeza de lista por Asturias, Adriana Lastra.

El secretario general de la FSA, Javier Fernández, admitió que los resultados electorales deben abrir "una reflexión en el PSOE" y también "en el conjunto de las fuerzas políticas", tanto de España como de Asturias. "La gobernabilidad en España sigue siendo complicada", advirtió un Javier Fernández, que quiso dar un toque de atención al resto de partidos que integran la oposición en la Junta General del Principado: "En Asturias todos debemos pensar los resultados y analizar cuál va ser la actuación a partir de ahora", advirtió el presidente del Principado. "Nosotros vamos a reflexionar, espero que los demás lo hagan. Hay una atmósfera política muy tensa, muy crispada, a lo que han ayudado tres elecciones de manera tan continuada, pero también la actitud de determinadas fuerzas políticas. Ahora habría que sosegar un poco y a partir de ahí esperemos que tengamos una relación distinta".

El secretario general de la FSA no quiso extenderse en valoraciones sobre los pactos postelectorales durante el primer balance, apresurado, de la noche electoral, que se produjo incluso antes de la comparecencia pública de Pedro Sánchez, el candidato socialista a la Moncloa. Aún con esas reservas, Javier Fernández adelantó sus primeras impresiones. "Las esperanzas de un gobierno de la izquierda son mucho menores que antes. La aritmética pesa mucho pero no es el momento de pronunciarnos sobre posibles alianzas y acuerdos", planteó el presidente del Principado y secretario general de la FSA.

Adriana Lastra achacó a Pablo Iglesias, sin nombrarlo, la responsabilidad del ascenso del PP. "El 20-D los resultados fueron distintos, las fuerzas progresistas sumábamos más pero hubo quien no quiso llegar a un acuerdo porque entendía que tendría un resultado mejor, obligándonos a ir a otras elecciones. No engañaron a nadie. Ahora habrá que reflexionar y saber gestionar la complejidad del Congreso de los Diputados". La cabeza de lista por Asturias quiso hacer en público "un guiño" al candidato al Senado, Vicente Álvarez Areces, por revalidar su escaño. "Lo teníamos todo en contra, querían expulsarnos de la vida pública. Hubo acoso y derribo a los candidatos del PSOE.