A punto de cumplir un año el certificado energético obligatorio para los inmuebles que se venden o alquilan, la ingeniería asturiana Certifica Norte, pionera en el sector, nos recuerda los principales problemas que puede ocasionar no estar al día:
Sanciones administrativas. Las multas varían entre los 300 y los 6.000 € en función de la gravedad. Madrid, Navarra y Cataluña han comenzado las inspecciones a técnicos, agencias y particulares. El certificado es obligatorio desde que se anuncia el inmueble.
Los contratos que se hagan sin certificado pueden ser considerados nulos. Esto es un problema potencial sobre todo en el caso de alquileres, y aún más en locales comerciales, donde las cantidades a devolver son más elevadas.
Hay un tercer problema a evitar una vez decidimos hacer el certificado: si está mal hecho podemos perder dinero. Que un inmueble tenga una calificación baja depende en gran medida de sus características energéticas. Sin embargo, si un técnico experimentado dedica el tiempo suficiente para detallar las características del edificio a certificar, puede evitar que la calificación sea inferior a la real. Es decir, en general, a mayor detalle, mejor calificación. En el resto de países con certificado energético (lleva años implantado en toda Europa) una mala calificación significa menor precio de venta o alquiler. Hay que recordar que el certificado tiene 10 años de validez y esta pérdida se prolongará durante todo este tiempo para un alquiler.
El técnico debe acompañar y representar al propietario en todo el proceso de legalización del certificado, incluidas las posibles inspecciones de la administración. Sin el registro en el Principado el certificado no es válido. Las tasas para ese registro están ya definidas pero aún no se aplican.
