La Universidad de Oxford ha dado un paso mas allá y desde este mes de abril ya cuenta con su propio examen para medir el conocimiento de inglés.

La prueba ha sido diseñada por Oxford University Press, la editorial de esta Universidad, y se realiza de forma online. La principal diferencia con las pruebas de Cambridge, que miden el nivel de conocimientos a través de unos exámenes estándar (First o nivel intermedio, Advanced o avanzado, y Proficiency o superior), es que Oxford ha apostado por un único examen que permite al alumno conocer su nivel. Concretamente, se certifican el A1, B1 y B2, según el Marco Común Europeo de Referencia. Además, por primera vez, este examen permite conocer el nivel de conocimientos de cada una de las cuatro destrezas por separado: reading, listening, writing and speaking (comprensión lectora, auditiva, escritura y expresión oral, respectivamente).

Otra de las diferencias es la duración del examen, dos horas frente a las tres y media de Cambridge, y el tiempo de espera para la obtención de los resultados, que es de dos semanas. Este examen, denominado Oxford Test of English (OTE), sólo se puede realizar en los 77 centros españoles examinadores autorizados por Oxford University y cuenta con el reconocimiento de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE).