Madrid

Los equipos de rescate localizaron ayer el cadáver de Carlos Alonso Palate, de 34 años, uno de los dos ecuatorianos desaparecidos tras la explosión de una furgoneta bomba en el aparcamiento de la T-4 del aeropuerto de Barajas, lo que le convierte en la primera víctima mortal de ETA desde hace tres años y medio.

El dispositivo de rescate encontró el cuerpo a las 18.45 horas en el interior de un vehículo, sepultado bajo gran cantidad de escombros. El cuerpo fue hallado en el lugar en el que un amigo de Palate, a quien éste, que falleció por aplastamiento, había acompañado desde Valencia al aeropuerto de Madrid a recoger a su esposa, había indicado, horas antes del hallazgo, que dejó estacionado el vehículo.

El cadáver pudo ser reconocido visualmente por los rescatadores gracias a que el coche no ardió tras la explosión. Los nuevos datos facilitados por el amigo de Palate permitieron reorientar la búsqueda de modo que hacia las 18.30 horas un bombero localizó la placa del vehículo, en el que podía verse una manta que asomaba por una ventanilla.

Tras alcanzar el vehículo casi reptando, los bomberos pudieron rasgar la manta y comprobar que bajo la misma se hallaba el cadáver. El hecho de que el cuerpo estuviera cubierto con una manta y la posición reclinada del asiento confirman la hipótesis de que la víctima se había quedado a descansar en el interior de su vehículo, un Renault Clio estacionado en la planta cero y que, tras el atentado, quedó aprisionado por cinco forjados, que dos grúas trataban aún de apartar completamente anoche.

Respecto al otro desaparecido, fuentes oficiales de la Comunidad de Madrid señalaron que aún no se sabe cuánto tiempo habrá de pasar para encontrarlo, si aparece, «y en qué condiciones pueda estar», ya que se cree que su vehículo se encontraba muy próximo a la furgoneta bomba.

Tras conocerse la noticia del hallazgo del cadáver de Palate, el presidente Zapatero se reunió durante aproximadamente una hora con los familiares de la víctima, alojados desde el sábado en un hotel próximo al aeropuerto. Zapatero se interesó por los lugares de origen de los familiares de Palate y por el tipo de vida que llevaba la víctima en Valencia, ciudad en la que residía. Zapatero, quien adelantó la visita que hoy preveía hacer a los familiares de los desaparecidos, ha suspendido el viaje que tenía previsto efectuar, también hoy, a la localidad murciana de San Pedro del Pinatar para inaugurar una desalinizadora.

Por otra parte, familiares de un ciudadano uruguayo denunciaron ayer su desaparición. Esta persona tenía que haber volado el pasado día 30 desde Madrid hasta Uruguay. Sin embargo, sus familiares denunciaron que no lo encuentran ni en Madrid ni en su país de origen.