Madrid

La Policía detuvo la noche del lunes, en la provincia de Toledo, al presidente del autoconstituido Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio, Severo Moto, acusado de tráfico de armas con destino a su país. La detención, ordenada por la Audiencia Nacional, fue tachada de «montaje estrafalario» por el entorno del político.

El arresto se produjo en la localidad toledana de Fuensalida, tras una orden dictada por el juez Fernando Andreu en relación con el hallazgo, el pasado 4 de marzo, de dos armas largas de combate y una corta en el maletero de un coche aparcado en el puerto de Sagunto y que, previsiblemente, iba a ser embarcado en un buque con destino a Malabo.

La localización de estas armas ya había sido reivindicada por Malabo como un argumento en contra del mantenimiento, por parte de España, de la condición de asilo a Moto, que, al final, recibió el visto bueno del Tribunal Supremo.

El Ejecutivo de Malabo señaló que «todas» las operaciones ilegales del dirigente opositor han sido «emprendidas desde España», mientras el Gobierno en el exilio advirtió que cualquier acusación contra Moto deberá estar «documentada».