El magistrado conservador del Tribunal Constitucional Roberto García-Calvo falleció ayer en Madrid, según informaron fuentes del alto tribunal. García-Calvo, promovido por el PP, fue elegido en octubre de 2001. Su última aparición pública fue el pasado día 22, cuando asistió a la toma de posesión de dos nuevos magistrados de la Sala Tercera del Supremo. La muerte repentina de García-Calvo, a los 65 años, coincide con el posicionamiento que el Constitucional debe hacer en asuntos como el Estatut de Cataluña y la ley del matrimonio homosexual, ambas recurridas por el PP.

El vicepresidente del Gobierno autónomo de Cataluña, Josep-Lluís Carod-Rovira, declaró ayer a la Agencia Nacional Lusa que buscará apoyo de Portugal a la independencia catalana, y acusa a España de mantener una «tutela paternalista» sobre Lisboa. «Lo que menos interesa a Portugal es una España unitaria», afirma en una entrevista difundida ayer. Carod-Rovira acusa a Madrid de querer mantener una actitud de «imperialismo doméstico» sobre Portugal, donde «históricamente», asegura, «siempre hubo un cierto complejo por parte de algunos sectores dirigentes en relación a España».