La sentencia condena a dos años y medio de prisión a los dos cabecillas del grupo y a un año y seis meses a los otros trece acusados.

El grupo Hammerskin-España fue desmantelado en febrero de 2003 a partir de la 'operación Puñal' desarrollada por la Guardia Civil en las provincias de Madrid, Barcelona, Valencia y Guadalajara a raíz de diversos ataques racistas que tuvieron lugar en la Universidad Complutense y en varias localidades madrileñas en los meses anteriores.

En la sentencia la Audiencia de Madrid ordena la disolución de esta organización y el cese de todas sus actividades.