Madrid / Oviedo

El Partido Popular no descarta presentar una moción de censura. «Si la situación sigue como hasta ahora y cada vez va a peor, nosotros trabajaremos para que eso sea así», aseguró la secretaria general, María Dolores de Cospedal, en referencia a buscar los apoyos necesarios para que la iniciativa prospere, porque «no depende sólo de la voluntad del PP». Mariano Rajoy aseguró ayer que se ve «en condiciones de gobernar en cualquier momento» y retó al presidente Zapatero a un debate en el Congreso. Ante estas «amenazas» la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega acusó al PP de actuar de forma «irresponsable» al tratar de «desgastar» al Ejecutivo.

El PP no descarta «ninguna de las opciones recogidas en la Constitución», dijo Cospedal, para quien Zapatero «no se está ocupando de gobernar España», sino «demasiado entretenido» con la Presidencia española de la Unión Europea y el Desayuno Nacional de Oración.

«Si la situación sigue como hasta ahora y cada vez va a peor», el PP trabajará «para que eso sea así», dijo en alusión a la búsqueda de apoyos para que prospere una moción. Cospedal añadió que van a «intentar que la legislatura no dure todo lo que todavía nos queda», aunque «no depende sólo de la voluntad del PP». En su opinión, lo «más urgente» es que la política económica dé «un giro radical» .

«Cuando uno no está en el Gobierno la única vía que tiene para intentar un cambio es procurar una mayoría y proponer una moción de censura» contra un Ejecutivo que está «noqueado, paralizado y dando palos de ciego», dijo Cospedal. «Estamos preparados para gobernar y estamos ya preparados para hacerlo», concluyó.

En esta línea, Mariano Rajoy afirmó que se ve «en condiciones de gobernar en cualquier momento» y retó a Zapatero a mantener un debate en el Congreso sobre la situación económica. Añadió que lo que tiene que hacer el PP es «plantear cosas útiles», a pesar de que haya voces que hablan de adelanto de elecciones, una hipotética moción de censura o un acuerdo para un gobierno de salvación con los socialistas.

Rajoy ofreció a Zapatero una «posición constructiva», aunque le ha avisado de que debe tener «coraje» y explicar a los ciudadanos por qué deben asumir «sacrificios», porque, «cuanto más tarde en actuar, peor irán las cosas». Miembros de la dirección del PP coincidieron en que su líder no se ha planteado en serio una inminente moción, sino que es algo que forma parte de una estrategia de presión al Gobierno, a la que se suma la petición de elecciones anticipadas con la que Esperanza Aguirre abrió fuego. En esta línea se pronunciaron ayer Ruiz-Gallardón y González Pons, entre otros populares que ven a Zapatero quemado.

La vicepresidenta Teresa Fernández de la Vega afirmó que es «una irresponsabilidad» que el PP, en lugar de contribuir a superar la crisis económica, utilice «todo» para desgastar al Ejecutivo y amenace con una moción de censura. Además, recordó que esto ya lo han anunciado los populares «durante mucho tiempo», pero apuntó que el Gobierno «está ocupado con la prioridad de superar la crisis». De la Vega advirtió al socialista José María Barreda que remodelar el gabinete es potestad de Zapatero.

El vicepresidente Manuel Chaves manifestó que no ve «ninguna necesidad» de convocar elecciones anticipadas y que Zapatero va a cumplir su mandato porque el suyo «es un Gobierno vivo, estable y que tiene un respaldo importante en el Parlamento». En esta línea, el portavoz José Antonio Alonso afirmó que no cree que se adelanten las elecciones porque «conociendo a Zapatero es sensato pensar que la legislatura se va a agotar y por tanto culminará en 2012».