Madrid / Oviedo

El PSOE e IU cerraron filas ayer en torno al juez Baltasar Garzón, al que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) suspendió cautelarmente el viernes de sus funciones como magistrado de la Audiencia Nacional tras haberle sido abierto juicio oral por su investigación de los crímenes del franquismo. El ministro de Fomento y vicesecretario de los socialistas, José Blanco, aseguró que detrás de la «campaña de acoso y derribo» a Garzón hay personas «muy dolidas» por las investigaciones del «caso Gürtel».

«Yo creo que detrás de algunas actuaciones hay una estrategia de acoso y derribo, porque están muy dolidos -y cuando el zapato aprieta se hace de todo- por las investigaciones que pusieron negro sobre blanco algunas actuaciones del PP y sus allegados muy vinculadas al "caso Gürtel"», indicó Blanco en una entrevista con la cadena de radio Onda Cero, recogida por Europa Press.

La secretaria de Organización socialista, Leire Pajín, expresó, por su parte, el «cariño y reconocimiento» que sienten los socialistas por Garzón por su lucha «intachable» contra el terrorismo y en favor de los Derechos Humanos y de la Memoria Histórica. A su vez, la secretaria de Relaciones Internacionales socialista, Elena Valenciano, manifestó que «algo no cuadra» cuando «los aplausos suenan en la extrema derecha» tras la decisión del CGPJ.

Desde IU, su coordinador general en Madrid, Gregorio Gordo, sostuvo que la suspensión revela que todavía «existen en la Judicatura demasiados vestigios del franquismo». El secretario general del PCE, José Luis Centella, opinó que la decisión del Poder Judicial es «vergonzosa para un país como España», mientras que CC OO, en un comunicado, advirtió de que la suspensión supone un «golpe para la democracia» y un «apoyo intolerable» a grupos de extrema derecha, que «han visto cómo prosperan sus demandas para que no se investiguen los crímenes del franquismo». También el PNV salió en defensa del juez suspendido. Su parlamentario autonómico Ricardo Gatzagaetxebarria aseguró que el juez es como «cualquier ciudadano» ante la acción de la Justicia, aunque recordó que, en el caso por el que ha sido suspendido, debe tenerse en cuenta «el fondo del asunto», es decir, que investigaba presuntos crímenes cometidos durante el franquismo.

Por otra parte, el aplazamiento a la próxima semana de la decisión que el CGPJ ha de tomar sobre la petición de traslado de Garzón al Tribunal Penal Internacional (TPI), ha generado indignación entre sus vocales progresistas, que acusaron a los conservadores de «desleales». Fuentes de estos vocales declararon que, tras la suspensión, daban por hecho que el viernes por la tarde se accedería al traslado al TPI.