El Tribunal Constitucional admitió ayer a trámite el recurso de Bildu contra la sentencia del Supremo que prohibió a sus candidaturas concurrir a las elecciones municipales por considerar que responden a un pacto para permitir a Batasuna-ETA volver a las instituciones, algo que para la coalición vulnera sus derechos fundamentales.
Así lo acordó la Sala Segunda del TC, que además decidió dar traslado del recurso a la Fiscalía y la Abogacía del Estado para que presenten alegaciones antes de que hoy vuelva a reunirse para deliberar sobre el fondo del asunto y decidir si lo eleva al pleno.
La Sala decidirá además sobre la recusación por Bildu de uno de los seis magistrados, Francisco José Hernando, nombrado ponente de la sentencia por el TC, adonde ha llegado a propuesta del PP. Se trata del ex presidente del Supremo que se sentó al frente de la Sala del 61 cuando con la ley de Partidos se ilegalizaron varias formaciones aberzales y se anularon cientos de listas por su vinculación con Batasuna y ETA.
El Constitucional dispone sólo de horas para tomar una decisión sobre Bildu antes de que esta medianoche arranque la campaña electoral. Una decisión que en principio corresponde a la Sala de lo Penal, compuesta por tres progresistas y tres conservadores. Si el asunto pasara al pleno aumentaría de forma decisiva las posibilidades de que la coalición logre luz verde ya que en él hay siete magistrados progresistas frente a cuatro conservadores.
La impugnación de las candidaturas de Bildu ha abierto una rotunda división entre los socialistas. Entre los que defienden abiertamente que deben estar en las elecciones figuran el PSC, el lendakari, Odón Elorza, José María Benegas y el número dos del PSOE en el Congreso, Eduardo Madina, quien pidió en voz alta un fallo «agradable», algo con lo que muchos están de acuerdo en su partido y en el Gobierno. En contra se han situado José Bono y Carme Chacón.
El presidente del Congreso se reunió ayer con Josu Erkoreka para evitar que el PNV rompa el pacto con el Ejecutivo, lo que sería letal para Zapatero. El portavoz nacionalista avisó de que ve al Gobierno «contra las cuerdas» y que «sólo puede ser salvado por la campana» del TC. Mientras la cúpula del PNV se reunía ayer con Bildu, el PP denunciaba presiones socialistas para que se deje a la coalición estar en las elecciones.
Por último, la simpatía por los aberzales llega a la cota más alta de los últimos cuatro años en Euskadi.
