Alfredo Pérez Rubalcaba ha admitido hoy que se plantea nombrar a una mujer como su "número dos" en el PSOE si es elegido secretario general del partido en el congreso que este fin de semana se celebra en Sevilla.

"Es una posibilidad que no les oculto que tengo en la cabeza" ha señalado Rubalcaba a preguntas de los periodistas tras reunirse en Madrid con un grupo de mujeres socialistas.

Por otro lado, y en presencia de la feminista Amalia Valcárcel y sus colaboradoras las diputadas Elena Valenciano y María González, Rubalcaba ha prometido que si se convierte en secretario general "confrontará" con el Gobierno del PP en la defensa de todos los derechos de las mujeres que "la derecha ha decidido empezar a derrumbar".

El candidato a liderar el PSOE ha apuntado que no es el momento de decir a quién propondría en la dirección del partido si gana la batalla a Carme Chacón, y prefiere esperar a ver cómo se desarrolla el congreso, si bien ha asegurado que quiere "contar con todos".

De nuevo se ha referido a Patxi López, y ha vuelto a hacer una "declaración de amor político" hacia él, pero otra cosa, ha matizado, es hablar del puesto que podría ocupar en la dirección del partido, porque "es el lehendakari de todos los vascos". "Le conozco muy bien y ése es el puesto que ocupa y que le preocupa", ha añadido.

En este final de campaña interna, Alfredo Pérez Rubalcaba ha asegurado sentirse "feliz" de cómo se ha desarrollado el proceso, y también ha dicho que va "muy tranquilo, muy satisfecho y muy esperanzado" al cónclave sevillano.

Ha insistido en que su equipo no va a dar datos sobre los apoyos que creen tener porque los delegados votan en conciencia y en secreto y a muchos de ellos "les molesta profundamente que se les atribuya una intención determinada de voto".

Como ejemplo ha puesto al secretario de los socialistas jienenses, Francisco Reyes, que según Rubalcaba le ha dado hoy su apoyo pero advirtiendo de que habla por sí solo y no por toda su delegación.

El candidato ha reiterado que se siente orgulloso de su partido y de haber comprobado que los socialistas no están con los brazos caídos, sino todo lo contrario, aunque admiten su preocupación por la situación actual y son conscientes de que queda mucho trabajo por delante para recuperar la confianza de los ciudadanos.

Rubalcaba se ha reunido con mujeres del PSOE y feministas como Amalia Valcárcel, que como ha explicado esta última, hace unos días hicieron un manifiesto para que lo suscriba el que sea elegido secretario general.

Un documento que, según ha señalado el candidato, hace una defensa de lo conseguido hasta ahora en pro de la igualdad y que, "desgraciadamente" es de "aplicación inmediata" a la vista de las políticas que plantea el Gobierno del PP.

"La derecha ha decidido empezar a derrumbar lo que tanto tiempo ha costado construir", ha señalado Rubalcaba.

Por eso ha prometido que "confrontará" al Ejecutivo en materias como la ley del aborto o la píldora postcoital, que en este último caso ha resultado ser "un remedio eficaz contra una de las mayores desgracias que puede sufrir una mujer, quedarse embarazada sin quererlo siendo adolescente".

También ha prometido que si es elegido hará que la Secretaría de Igualdad del PSOE "pase a ser importante" y que no sólo quien la ocupe sea fuerte, sino que esté "bien situada" en el organigrama del partid y con medios suficientes.

"Si soy secretario general así será, porque desgraciadamente parece que vienen tiempos difíciles para las mujeres en nuestro país", ha añadido, además de prometer que el PSOE no consentirá que las organizaciones feministas se queden "a la intemperie".