Varios ministros se apresuraron ayer a desmarcarse abiertamente de las declaraciones de Alberto Ruiz-Gallardón en las que afirmó que él no aprecia inconstitucionalidad en la ley del matrimonio gay. El titular de Justicia explicó que se limitaba a expresar un pronóstico a la espera de que el Tribunal Constitucional se pronuncie sobre el recurso que el PP interpuso contra la norma en 2005.
Esta defensa del matrimonio entre personas del mismo sexo hecha por Gallardón, a título personal, provocó una controversia en las filas populares. La réplica más contundente corrió a cargo del ministro del Interior. «Si no hubiéramos pensado que era inconstitucional no hubiéramos votado en contra ni presentado un recurso», dijo Jorge Fernández Díaz. «Esta es la posición del Gobierno, como ha defendido en reiteradas ocasiones» Mariano Rajoy, añadió.
La titular de Sanidad, Ana Mato, también marcó distancias con Gallardón al advertir de que «cada uno es libre de dar su opinión», pero la postura del Ejecutivo «no ha cambiado», sigue a la espera del fallo del TC para «actuar en consecuencia». La Ministra aclaró, no obstante, que lo afirmado por el responsable de Justicia «en absoluto se contradice» con el programa del PP. José Manuel Soria, de Industria, evitó entrar en valoraciones, y pidió esperar a que haya una decisión sobre el recurso del PP sobre la ley del matrimonio gay.
Mientras la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría se negaba a pronunciarse sobre la postura de Gallardón, el portavoz del Grupo Popular, Alfonso Alonso (que siendo alcalde casó a varias parejas gays en Vitoria como Gallardón en Madrid), advirtió de que «antes que las opiniones personales está el partido». La postura más beligerante contra la defensa del matrimonio homosexual la expresaron varios parlamentarios católicos del PP, quienes lo consideraron inconstitucional.
La afirmación del Ministro de que lo considera constitucional fue aprovechada por el PSOE para acusar de hipocresía al Gobierno e instarle a que retire el recurso contra el matrimonio entre homosexuales. La misma reclamación al titular de Justicia hizo IU, la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales y la Fundación Triángulo, para que empuje al PP a dar marcha atrás. En cambio, el Foro de la Familia pidió al Gobierno que derogue esa ley sin esperar al fallo del TC.
Horas después Gallardón precisó que el PP no retirará el recurso contra el matrimonio gay. La postura del Gobierno es distinta a la que mantiene ante la ley del Aborto, que también recurrió pero que reformará sin demora. El Ministro explicó que el TC ya se ha pronunciado, hasta en tres ocasiones, sobre la interrupción del embarazo, estableciendo como doctrina que, más allá de los supuestos de despenalización, el no nacido no puede estar sometido «a una total desprotección» como implica, según dijo, «una ley estricta de plazos».
Por último, el PP rechazó ayer la propuesta del socialista Pérez Rubalcaba de revisar el concordato de la Santa Sede porque puede ser conflictivo.
