España y Portugal pedirán este martes a la Unión Europea (UE) que estudie posibles líneas de ayuda en favor de los agricultores y ganaderos para paliar el impacto de la sequía que afecta al país.

El asunto se tratará en un Consejo de ministros de Agricultura de la UE a solicitud de España y Portugal, países que ya pidieron a los titulares de Medio Ambiente, en su reunión del 9 de marzo, una respuesta comunitaria frente a la sequía.

En un documento conjunto transmitido al Consejo, ambos países llaman la atención sobre la "sequía generalizada" en sus territorios desde el pasado octubre, que en el caso de España ha sufrido una reducción de las lluvias de un 43 % con respecto a la media de ese periodo.

"Es posible que la grave sequía continúe", señala el texto, que advierte de que la falta de agua afectará a las cosechas de cereales, "lo que agravará la escasez de pienso para los animales, y por tanto aumentará aún más los costes de producción".

Por ello, los dos países piden al resto de socios europeos que "inicien el debate sobre las medidas que se podrían aplicar", entre las que incluyen el uso de los pagos directos agrícolas, la autorización de medidas para compensar los altos costes, y la derogación de las primas ligadas a la producción de animales.

También plantean la posibilidad de recurrir a los fondos de desarrollo rural para financiar esas ayudas.

El documento alerta de que en España la sequía está afectando ya a la almendra, mientras que en Portugal los agricultores han tenido que recurrir al riego para mantener en buen estado los cultivos de las frutas y hortalizas.

Fuentes comunitarias explicaron que las ayudas permitirían aliviar los problemas de liquidez de los ganaderos en España, los más afectados por la situación, debido a que la falta de agua hace que su animales se vean privados de pastos donde alimentarse.

Según las cooperativas y organizaciones agrarias españolas, la ausencia de lluvias está poniendo en grave riesgo miles de hectáreas de cultivos y de pastos.

El mismo día del Consejo de ministros europeos de Agricultura, se reunirá en España la Mesa de la Sequía, que evaluará el impacto que está provocando en el campo.

En la Mesa participarán representantes de Cooperativas Agroalimentarias, de las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA y de los regantes adheridos a la Federación Fenacore.

Por otra parte, en la reunión de los ministros de la UE se debatirá cómo lograr que la propuesta de reforma de la Política Agrícola Común (PAC), actualmente en negociación, implique una menor carga burocracia para las autoridades nacionales y los productores.

Fuentes europeas indicaron que el único elemento de la reforma sobre el que hay consenso hasta ahora es el rechazo de todos los países a un aumento de los gastos administrativos con la futura PAC.

Según un estudio de impacto de la Comisión Europea, esos costes se incrementarían en un 15 % con la reforma prevista.

La Presidencia de turno de la UE, que este semestre ejerce Dinamarca, explicó que hasta la fecha una decena de países han remitido ideas concretas sobre cómo reducir la carga administrativa en ese ámbito.

Por otra parte, los ministros conversarán en un almuerzo de trabajo de la manera de lograr un equilibrio entre los Estados miembros en el reparto de las ayudas directas a los agricultores y las de desarrollo rural.