Sevilla / Oviedo, Agencias

Un total de 6.405.200 electores andaluces podrán ejercer hoy su derecho al voto en las novenas elecciones regionales, a las que concurren 33 formaciones políticas para elegir a 109 diputados, para lo cual depositarán sus votos en las 10.631 mesas electorales distribuidas en 3.871 colegios electorales.

Estos electores son un 2,7 por ciento más que en las autonómicas de 2008, y de todos ellos un 5,7 por ciento, un total de 368.154, son nuevos electores por haber alcanzado la mayoría de edad estos últimos cuatro años, y 176.245 son residentes en el extranjero. El voto por correo ha sido solicitado en esta ocasión por 97.225 electores.

Por cuarta vez desde la aprobación del Estatuto de Autonomía de Andalucía en 1981, las elecciones autonómicas dejarán de coincidir con las generales. Andalucía ha celebrado comicios autonómicos en ocho ocasiones anteriores: 1982, 1986, 1990, 1994, 1996, 2000, 2004 y 2008.

En cinco de ellas coincidieron con las generales: 1986, 1996, 2000, 2004 y 2008, y no lo hicieron en 1982, 1990 y 1994, aunque en esa ocasión se simultanearon con comicios al Parlamento europeo.

Los andaluces dispondrán hoy de papeletas electorales correspondientes a 33 formaciones políticas proclamadas por la Junta Electoral de Andalucía, aunque sólo doce presentan candidatura en las ocho circunscripciones de la comunidad autónoma. Tres de ellas corresponden a las fuerzas que tenían representación parlamentaria, PSOE, PP e IULV-CA, con 56, 47 y 6 diputados, respectivamente.

El actual presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, opta a la reelección, aunque la mayor parte de las encuestas sitúa en el palacio de San Telmo de Sevilla -sede de la Presidencia- a Javier Arenas (PP) y también otorga representación a la formación liderada por Diego Valderas (IU), que puede ser decisiva para que los socialistas mantengan el poder.

Griñán ha puesto como condición para pactar con IULV-CA no endeudarse por encima de la capacidad financiera ni «subordinar» el empleo y la educación, así como partir de un programa realista, que sepa lo que se puede hacer para dar soluciones a los problemas de la ciudadanía. Valderas, por su parte, ha dicho que «si las urnas dicen que Andalucía es de izquierdas, sólo se pondrán en valor políticas de izquierdas».

PSOE e IU nunca han gobernado coaligados en Andalucía, aunque los socialistas sí compartieron el poder con el Partido Andalucista entre 1996 y 2004.

Sin embargo, por primera vez hay un partido que llega a la cita con las urnas con visos de acabar con el Gobierno hegemónico del PSOE en Andalucía. Numerosas encuestas dan ganador al eterno aspirante del PP, Javier Arenas, y algunas, incluso, le otorgan mayoría absoluta.

La campaña ha estado marcada por los casos de corrupción y, en concreto, por los ERE irregulares que investiga la juez Mercedes Alaya, que ya ha mandado a la cárcel al ex director general de Trabajo Francisco Javier Guerrero y a su chófer Juan Francisco Trujillo.

Además, quien venza en las urnas tendrá que lidiar con una tasa de paro que supera el 31 por ciento, la más alta del conjunto del Estado, y una cifra de desempleados próxima a los 1,3 millones.