Madrid / Oviedo, Agencias

La consejera de Estado Amelia Valcárcel, profesora de la Universidad de Oviedo y ex consejera de Educación y Cultura del Principado, presidirá la comisión de garantías de igualdad que ayer acordó crear la ejecutiva federal del PSOE y que se encargará de asesorar a la secretaría de igualdad y de resolver conflictos internos en materia de igualdad.

Históricas dirigentes socialistas como Carmen Alborch, Francisca Sauquillo, Amparo Rubiales y Rosa Conde formarán parte de esa comisión, junto a los ex ministros Ángel Gabilondo y Antonio Camacho y la representante de Juventudes Socialistas Mirella Ruiz.

Al término de la reunión de la ejecutiva federal celebrada ayer, el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, explicó en rueda de prensa que esta nueva comisión será a la secretaría de igualdad lo mismo que la comisión de garantías democráticas y ética a la secretaría de organización.

También dijo que esta comisión podrá supervisar mociones de censura como la que recientemente presentó el PSOE en Ponferrada (León) con el apoyo de un edil condenado por acoso sexual y que generó una fuerte controversia dentro y fuera del partido.

Rubalcaba sometió ayer al examen de la ejecutiva federal sus propuestas de cambio para superar las últimas crisis internas vividas por los socialistas, tras un mes de tensiones por lo ocurrido en el Ayuntamiento de Ponferrada, el conato de ruptura con el PSC por el derecho a a decidir y la decisión de los socialistas gallegos de convocar unas primarias para elegir al nuevo líder del partido en esa comunidad.

Para empezar, Rubalcaba anunció el reparto de papeles acordado con la vicesecretaria general, Elena Valenciano: él se centrará a partir de ahora en su función de líder de la oposición y aumentará su agenda social e internacional. Valenciano, por su parte, verá notablemente incrementado su poder.

Con todo, el líder del PSOE reafirmó su compromiso de continuar al frente del partido hasta que se acabe «su contrato» -que, según recordó, finaliza en 2016-, porque tiene «ganas y fuerzas».

Antes de la reunión, fuentes de la cúpula socialista informaron de la incorporación a la ejecutiva del ex ministro Ramón Jáuregui, que vuelve a ella trece años después, aunque sin un puesto determinado, ya que la ejecutiva se aprueba en un congreso federal.

Además, Rubalcaba propuso que los diputados César Luena y Carmen Montón se sumen a la dirección del grupo parlamentario en el Congreso, en el que sigue sin estar representado ningún miembro del PSC tras la renuncia de José Zaragoza.

Precisamente sobre la crisis con el PSC, Rubalcaba dijo en la rueda de prensa que el PSOE y los socialistas catalanes han sentado las bases para un diálogo que lleve a un acuerdo sobre la relación entre ambos partidos buscando la «simetría» en la participación que la dirección de cada uno tenga en la del otro.

En estas bases, los dos partidos coinciden, además, en que la reforma constitucional para «federalizar» España será el objetivo compartido.

Además, el secretario general socialista confirmó que el partido recurrirá ante el Tribunal Constitucional la normativa recientemente aprobada por la Asamblea de Madrid por la que se autoriza la privatización de seis hospitales de la comarca, así como otros 27 centros de salud madrileños.