El PP promoverá un pacto ético con los demás grupos para estudiar cuándo un cargo público implicado en un caso de corrupción debe abandonar sus responsabilidades políticas, de forma que los partidos puedan aplicar el mismo criterio ante casos similares.

Así lo adelantó el dirigente popular José Antonio Bermúdez de Castro, quien pidió el apoyo a los demás partidos porque es una «obligación» impulsar estas medidas de regeneración ante la «la alarma social» por los casos de corrupción. Rosa Díez, de UPYD, afirmó que la «omertà» (ley del silencio) del PP y el PSOE y la impunidad han fomentado esta lacra y ya no basta con pedir perdón.

Los partidos están obligando a dimitir a sus representantes de poco rango cuando son imputados por delitos relacionados con la corrupción, pero no proceden de la misma forma cuando los afectados son sus altos cargos, a los que «salvan» y blindan en sus escaños alegando presunción de inocencia y aplazando la decisión a fases más avanzadas de la acción judicial, según datos recopilados por «Europa Press».

Éste es el caso del ex ministro socialista José Blanco, los diputados de CiU Oriol Pujol y Xavier Crespo, el parlamentario del PSC Daniel Fernández o el del diputado de IU en Asturias Ángel González, quienes durante el último trimestre han tenido que hacer frente a diferentes casos relacionados con la corrupción pero se han negado a abandonar sus escaños con el respaldo de sus partidos. Éstos se suman a los nueve diputados del PP valenciano que siguen en sus puestos pese a estar inmersos en procesos judiciales.

El PP tiene previsto dejar para otoño su convención nacional, una cita que estará más cerca de las elecciones europeas de 2014 y le servirá para renovar ideas y mensajes. Aunque en principio pretendía celebrarla antes de junio, Génova ha optado finalmente por posponerla, máxime cuando en este momento el «caso Bárcenas» sigue en todo su apogeo en sede judicial y el partido quiere evitar que su ex tesorero siga copando la atención mediática. Las fuentes consultadas han indicado que el PP quiere disponer de más tiempo para «acercarse a la gente de la calle» y explicar las reformas que está impulsando el Gobierno de Rajoy.

Mientras, arranca la nueva etapa del PSOE con Elena Valenciano en la intendencia del día a día. En Ferraz, ha explicado, trabajan a toda máquina para ofrecer un proyecto de oposición alternativa. El secretario general del PSE-EE, Patxi López, afirmó que es el momento de que la nueva dirección, liderada por Rubalcaba, «demuestre que está a la altura de las circunstancias» después de haber dejado «atrás las intrigas palaciegas». Avisó además de que «las decepciones paralizan» .