Miles de personas se manifestaron este sábado en varias ciudades de España y de otros países europeos para protestar con los contra las políticas "de recortes, desahucios y privatizaciones" impuestas en Europa por la "troika" -Comisión Europea (CE), Banco Central Europeo (BCE) y Fondo Monetario Internacional (FMI)-.
En Madrid asistieron varios millares de manifestantes a una marcha convocada por el colectivo Marea Ciudadana y en cuya cabecera se portaba una pancarta con el lema "pueblos unidos contra la troika". No debemos, no pagamos".
El coordinador federal de Izquierda Unida (IU), Cayo Lara, consideró que la calle debe responder a las medidas dictadas por la CE a España, consistentes en señalar al Gobierno una nueva subida de los impuestos indirectos, la aplicación de recortes en las pensiones y una nueva reforma laboral que establezca salarios inferiores al mínimo interprofesional (SMI).
Lara señaló que "si no respondemos en la calle, el mensaje será que estamos dispuestos a aceptar cualquier imposición", y criticó el pacto que están negociando PP y PSOE, a los que sugirió que si tienen algo que acordar sea la supresión del artículo 135 de la Constitución, la retirada de la reforma laboral o la aplicación de una política fiscal progresiva.
En la manifestación madrileña también participó el líder de Siryza (Coalición de la Izquierda de Grecia), Alexis Tsipras, que en declaraciones a Efe, dijo que contra la austeridad decidida por la "troika" hay que oponer la resistencia de los pueblos, lo que permitirá mantener el optimismo en el futuro.
Por su parte, el representante de la organización portuguesa "Que se lixe a Troika" (que se fastidie la "troika") Joao Camargo defendió estas movilizaciones porque sirven para impedir que se impongan los criterios neoliberales con los que nos quieren hacer retroceder a condiciones sociales y económicas de principios de 1800 con la excusa de arreglar la deuda o el déficit.
Ante la sede de la Comisión Europea en Madrid se leyó un manifiesto de Marea Ciudadana contra la "troika" en el que se criticaban las "brutales e injustas" políticas neoliberales de recortes que han conducido al paro y a la pobreza a millones de personas en Europa con la excusa del pago de una deuda en su mayoría privada.
Derechos frente a la avaricia de las instituciones
Frente a estas y otras injusticias, en el manifiesto se proponen cambios en el sistema democrático, encaminados a aumentar la participación con el fin de que los derechos ciudadanos se impongan a la avaricia de las instituciones, entidades financieras y multinacionales.
En Barcelona han protestado contra la "troika" y sus medidas de austeridad más de 2.000 personas en un acto que ha transcurrido sin incidentes por el centro de la capital catalana y que se ha desarrollado bajo el lema de "No pagarem el seu deute. Que es foti la troika!" ("No pagaremos su deuda. ¡Que se joda la troika!").
Más de un millar de personas participaron en Zaragoza en la manifestación contra de las políticas de la "troika" y para pedir la dimisión del delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, por reprimir las protestas de los ciudadanos en la calle.
En Valladolid acudieron a la protesta alrededor de medio millar de personas que pedían "Democracia real ya" o "una banca pública con control democrático", mientras que en Segovia participaron unas trescientas personas, un centenar en Salamanca y en Pamplona varias decenas de personas convocaron una cacerolada.
Las manifestaciones convocadas en España, que han contado con la participación de numerosos grupos y organizaciones políticas y sindicales, forman parte de una jornada internacional de lucha que se está celebrando en alrededor de un centenar de ciudades europeas de países como Alemania, Francia, Italia, Grecia o Reino Unido.
