El ex tesorero del PP Luis Bárcenas defraudó 5.352.870,6 euros a Hacienda en los ejercicios 2002, 2003, 2006 y 2007, según la estimación provisional que la Agencia Tributaria ha remitido al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz en la investigación del 'caso Gürtel'.

Las cuotas que el ex responsable de finanzas del Partido Popular dejó presuntamente de ingresar al fisco durante ese tiempo corresponden al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y al Impuesto sobre el Patrimonio (IP).

En el desglose efectuado, de forma provisional, por la Unidad de Auxilio Judicial de la Agencia Tributaria se cifra en 307.850,86 euros la cantidad defraudada en concepto del IRPF de 2002 y en 186.972,14 euros por el Impuesto sobre el Patrimonio del mismo año.

Un año después habría dejado de pagar 1.179.607,40 euros por IRPF y 307.520,31 euros en concepto de Impuesto sobre el Patrimonio. En 2006, defrauda junto a su esposa Rosalía Iglesias 222.112,58 euros en concepto de IRPF, por lo que Bárcenas responde a título de cooperador necesario.

Finalmente, habría defraudado 2.015.463,00 y 1.133.344,31 euros por IRPF e Impuesto sobre el Patrimonio de 2007, respectivamente.

Ruz tienen en cuenta otros indicios

Estas cantidades figuran en el auto dictado este viernes por el juez Ruz en el que ha impuesto al ex tesorero de los 'populares' una fianza de 43.250.00 millones de euros en concepto de la responsabilidad civil que pudiera derivarse del procedimiento, en el que se le imputa la comisión de tres delitos contra la Hacienda Pública (2002, 2003 y 2007) y otro como cooperador necesario (2006), cohecho, blanqueo de capitales, falsedad en documento mercantil y estafa procesal en grado de tentativa.

La cantidad se fija de acuerdo con la estimación provisional realizada por la Unidad de Auxilio Judicial de la AEAT y los correspondientes intereses de demora. Además, ha tenido en cuenta el dinero presuntamente abonado por el cabecilla de la trama Gürtel Francisco Correa --que considera incorporadas a las sumas que mantenía ingresadas en sus cuentas suizas del Dresdner Bank y el Lombard Odier--así como las multas que se le aplicarían por la comisión de los distintos delitos.

Ruz advierte que el cálculo es aún provisional debido a que está pendiente la incorporación a la causa de las nuevas comisiones rogatorias remitidas a Suiza y a Estados Unidos cuyo resultado podría obligar a una nueva redefinición de la fianza.