El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se defendió ayer de las críticas a su persona y a la Agencia Tributaria (AEAT) relacionándolas con los problemas fiscales que tienen algunos medios de comunicación. Montoro ofreció al PSOE pactar un nuevo estatuto de la AEAT para hacer más transparente su política de nombramientos y evitar filtraciones, pero los socialistas pidieron su dimisión y una comisión de investigación para saber, llegando "hasta el final", qué está ocurriendo en el departamento.

"Cuando veo algunas informaciones, digo: "¿Será alguna forma de presión?"", explicó Montoro en una interpelación del Grupo Socialista sobre las últimas destituciones y dimisiones en la AEAT. "Lo que hace daño es que una información periodística falsee y diga que a una multinacional se le ha rebajado la sanción. Yo digo que no es verdad", aseguró en la sesión de control al Gobierno en el Congreso.

Montoro aludía así, sin citarla, a la cementera mexicana Cemex, cuyo recurso contra una multa de 450 millones fue rechazado por una jefa de inspección de la Delegación Central de Grandes Contribuyentes que, después, fue destituida. Días más tarde dimitió su inmediato superior, Ignacio Ucelay, y, la semana pasada, el director de Inspección Financiera y Tributaria, Luis Jones, renuncia a la que siguieron cuatro destituciones más de altos cargos.

Montoro explicó ayer que cuando el medio -no dijo cuál- consultó en el Ministerio, se le dijo que no era cierto que se hubiese producido ninguna rebaja de la multa a Cemex, y aquel "siguió adelante porque dijo: "Son mis fuentes". Que explique cuáles son", exigió.

El Ministro se quejó de los reportajes que tratan de relacionarle "con un pasado que no es presente", en referencia a la asesoría que fundó en 2006 -Montoro y Asociados- y de la que se desligó completamente en 2008, cuando fue nombrado portavoz económico del PP en la oposición, explicó. Montoro negó cualquier relación profesional con Cemex.

"Esos reportajes los veo en determinados medios que, por cierto, tienen bastantes problemas económicos, y lo sé porque vienen a mi despacho a contármelos (...) pero eso no quiere decir que tengan aplazamientos", aclaró.

En lo tocante a las destituciones y dimisiones en la AEAT, el titular de Hacienda negó haber dicho que se deban a razones ideológicas por tratarse de inspectores socialistas. Y precisó que a lo que se refería es a que en la Delegación Central de Grandes Contribuyentes hay "al menos" seis altos cargos políticos (no funcionarios) nombrados por el Ejecutivo del PSOE para "puestos relevantes". Entre ellos, incluso, un ex secretario de Estado de Hacienda socialista. De todo lo cual no supo nada hasta estos últimos días.